El problema de tratar de hacer que el ejercicio sea un hábito, y es algo que todos enfrentamos, es que generalmente intentas hacer ejercicio 3 o 4 veces a la semana … y eso dificulta la creación de un nuevo hábito de ejercicio. La razón es que cuanto más consistente es una acción, más probable es que sea un hábito.
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Por lo tanto, es algo con lo que estoy totalmente de acuerdo, hacer ejercicio todos los días es más probable que resulte en un hábito, algo que se vuelve casi automático, y mucho más fácil, en lugar de una lucha constante.
He implementado esta idea en mi vida diaria recientemente, alternando todos los días entre diferentes ejercicios: correr, nadar, andar en bicicleta y entrenar con fuerza, como una forma de alcanzar mi meta.
Si vas a hacer de esto un hábito, haz un Desafío de 30 días, y al final del desafío tu hábito debería estar bastante bien arraigado.
Aquí hay algunas sugerencias prácticas que he aprendido en el camino para ayudar a que el ejercicio sea un hábito diario:
1-Establecer una hora
Decida si es más probable que se quede con él en la mañana, a la hora del almuerzo o en la noche, y respete esa hora. Programé la hora de las 7:00 am todos los días, y estoy haciendo todo lo posible por no variar a partir de esa hora. Si no establece una hora, es más probable que la posponga hasta que tenga más tiempo o energía, y luego la apague hasta el día siguiente. Pronto, no es un hábito en absoluto.
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2-Envíese un recordatorio.
Utilizó un recordatorio en el celular , pero hay varias formas de enviarte un correo electrónico o un recordatorio de texto para que nunca lo olvides. Luego, cuando recibas el recordatorio, hazlo de inmediato. No soporte ningún retraso.
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3-Comience poco a poco.
Esta es quizás la sugerencia más útil de todas. Cuando comienzo a hacer ejercicio, siempre comienzo con mucha energía, entusiasmo y ambición. Creo que puedo hacer más de lo que puedo. Sin embargo, hacer demasiado al principio lleva al agotamiento, lo que lleva a dejar su hábito. Cuando intenta hacer que el ejercicio se convierta en un hábito diario, es probable que tu cuerpo no esté acostumbrado a ese tipo de estrés. La clave: solo haz 20 minutos al principio, y hazlo de forma fácil y agradable. Nada difícil Incluso 10-15 minutos está bien al principio, si estás empezando. La clave es salir, acostumbrar el cuerpo lentamente al ejercicio diario y formar ese hábito.
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4-Progreso después.
Una vez que su cuerpo está acostumbrado al ejercicio diario, puede comenzar a aumentar lentamente la cantidad y la intensidad de su ejercicio. Espere por lo menos dos semanas antes de comenzar a aumentar, eso es lo mínimo que su cuerpo necesita para adaptarse. Una vez que comienza a sentirse demasiado fácil, puede comenzar a aumentar la duración de sus entrenamientos, a 30 y luego a 40 minutos, y eventualmente hasta una hora. Una vez que lo haga, puede aumentar gradualmente la intensidad, por ejemplo, correr más rápido o más fuerte. Trate de no aumentar la distancia y la intensidad al mismo tiempo.
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5-Hágalo placentero.
Si asocia un hábito con el dolor, te alejarás de él. Pero si es divertido, tendrás ganas de hacerlo. Por eso, en esta etapa inicial de mi nuevo hábito, me he centrado en el placer. Voy despacio, disfrutando del paisaje, el aire fresco de la mañana, el hermoso cielo mientras sale el sol, el momento tranquilo de la soledad y la contemplación. En realidad es algo que disfruto haciendo. Un reproductor de mp3 con buena música ayuda.
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6-Coloca tu equipo.
Cuantos menos obstáculos y menos fricción haya en la formación de su nuevo hábito, mayor será la probabilidad de que tenga éxito. Si no solo tienes que levantarte temprano, sino también un poco de equipo mientras estás medio despierto, es posible que desees volver a la cama. Pero si coloca su ropa y sus zapatos de entrenamiento, su reloj y reproductor de mp3, o lo que necesite para su ejercicio, estará listo para comenzar sin ninguna fricción.
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7-Sólo sal y comienza
Mi regla es simplemente ponerme las zapatillas y salir por la puerta. No me preocupo por el tiempo que tengo que ir o lo difícil que será. Solo sal y comienza. Una vez que he hecho eso, es un pedazo de pastel.
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8-Mezclarlo.
Una cosa muy importante es trabajar todos los grupos musculares, por esta razón es importante que realice diferente tipos de ejercicios que te permitan bajar de peso y tonificar. Eso les da la oportunidad de recuperarse, porque sin la recuperación, simplemente estás rompiendo tus músculos una y otra vez.
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9-Tener un día de descanso relativo.
Una vez más, la recuperación es muy importante. Es por eso que necesita darle a su cuerpo la oportunidad de descansar. Si se lo toma con calma y solo hace 20 minutos, deberías estar bien sin días de descanso. Pero aún es bueno tener un día de descanso, donde no este haciendo los mismos ejercicios que los otros seis días. No quieres saltarte el día por completo, porque entonces no estás siendo consistente con tu hábito. Por eso hago un día de entrenamiento de fuerza, donde no uso los mismos músculos. Si necesita más descanso, puede caminar 20 minutos o incluso una sesión de meditación. La clave es hacer algo todos los días, preferiblemente algo que te ponga en movimiento (la meditación no es el mejor ejemplo, pero al menos estarías haciendo algo) y mantendrás en marcha tu formación de hábitos.
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10-No te saltes un día.
Es fácil decir: “No hay problema, lo he estado haciendo durante cinco días … ¡solo lo omitiré hoy!” Pero eso dificultará la formación de su hábito. La consistencia es clave, así que trate de no saltarse un solo día. Si lo hace, no se castigue, no se juzgue, no se sientas mal, a veces todos se meten en líos y la formación de hábitos es una habilidad que requiere práctica. Simplemente comienza de nuevo el desafío de 30 días e intenta identificar el obstáculo que lo llevó a saltarse un día y prepararse para este momento.
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