¿A quién no le gustaría tener unas piernas esbeltas y tonificadas para ponerse atuendos que le resalten su figura? ¡Yo creo que a todas! Si bien, la flacidez de los muslos es uno de los problemas estéticos más comunes, para lucir unas piernas firmes y con la piel tersa es todo un desafío para la mayoría de mujeres y hombres, sobre todo si se deja de hacer ejercicio y no se tiene buena genética o ya porque a partir de cierta edad se empieza a notar, por estas razones es importante conocer por qué se da la flacidez, como evitarla y qué ejercicios nos sirven para acabarla.
A muchos de nosotros nos aparece la flacidez en el muslo interno en una cierta edad, quizás por los cambios hormonales que hacen que se destruya el colágeno y la elastina, fibras responsables de mantener la piel firme y tersa, o porque tuviste una pérdida de peso brusca, falta de ejercicio físico y la vida sedentaria, que provocan que los músculos pierdan su fuerza, falta de proteínas en la dieta también hace que los músculos se vuelvan más flácidos, sea lo que sea sabemos que debemos hacer algo, como quizás aplicarnos cremas reafirmantes o aplicación de técnicas estéticas, esto nos puede ayudar pero para combatir la flacidez en esta zona es mejor combinarlo con el ejercicio. Por eso aquí te mostramos algunos ejercicios para hacer acostada que eliminan la flacidez del muslo interno.
Para esta rutina vas a tener que durar aproximadamente unos 10 minutos, 30 segundos en cada ejercicio. Como te sientas cómoda la idea es sin descanso hasta cumplir el tiempo o si eres una de las personas que hasta ahora está empezando hazlo sin descanso hasta los cinco minutos.
-Primer ejercicio:
Acuéstate en una colchoneta boca arriba, dobla una pierna y la otra estírala. Comienza a mover la pierna al lateral abriéndola y cerrándola. Sin dejarla caer controla la subida y la bajada. Eso ayudará a trabajar la parte interna del muslo.
– Segundo ejercicio:
Para este siguiente ejercicio en la misma posición que estás vas a tener que abrir las piernas en forma de una mariposa y vas a subir y bajar solo con la cadera apretando con fuerza para sentir la intensidad.
– Tercer ejercicio:
Cómo el primer ejercicio, vas a doblar una pierna y la otra estirarla, esta vez vas a empezar subiéndola y bajándola con movimientos lentos. Marca el ejercicio y sigue apretando el abdomen. Después de unos 30 segundos de cada lado en la misma postura subiendo y bajando la pierna vas a tocar el talón de la parte interna con la mano contraria.
– Cuarto ejercicio:
Para cambiar de movimiento con la pierna estirada vamos a empezar a hacer círculos grandes controlando la bajada y la subida. Los círculos de adentro hacia afuera y de afuera hacia adentro.
– Quinto ejercicio
Con la espalda recta y acostada, vas a estirar totalmente las piernas y vas a abrirlas y cerrarlas. Estiras completamente cuando abres con tiempo de dos y mantienes.
– Sexto ejercicio:
Por este último ejercicio vas a estar igual que el anterior pero esta vez vas abrir las piernas en tres tiempos. Cada ejercicio de esta rutina la repites 4 veces por 30 segundos.
Trata de complementar tu ejercicio con una alimentación balanceada y nutritiva, pues ésta incide muchísimo en la composición corporal de cada persona, tampoco dejes a un lado el consumo de agua qué es clave para que tus piernas y muslos se vean como los deseas. Es fundamental ofrecer al cuerpo alimentos de calidad, ricos en proteínas y carbohidratos. El músculo debe utilizar como combustible la proteína, la glucosa, la grasa y el fosfato de creatina. Por lo tanto, evitemos los azúcares refinados y productos ricos en grasas saturadas, como puede ser la bollería industrial.
Recuerda que antes que todo es imprescindible iniciar y terminar esta rutina que te acabamos de enseñar con unos minutos de calentamiento para prevenir lesiones y dolores en los siguientes días. Así que aprovecha y haz estos ejercicios en casa o en cualquier lugar donde te sientas cómoda para que entrenes de dos a tres veces por semana. Mantente enfocada si quieres lograr grandes resultados.