Empecemos por definir que el autoestima son todos aquellos pensamientos, sentimientos, y evaluaciones que tenemos sobre nosotros mismos, ya sea por la forma de ser y el carácter o algún aspecto particular del cuerpo, es decir es lo que yo siento y pienso sobre mí. Está en ocasiones es baja por circunstancias vividas, pensamientos negativos provenientes de otras personas logrando que nuestra percepción cambie a lo largo de la vida, pero que con las acciones pertinentes se puede elevar y mejorar.
El autoestima es la clave para tener una salud emocional, psicológica adecuada, ya que al sentirse bien con lo que somos, influye en la forma de ver el mundo, de interactuar con él de forma sana sin que afecte la tranquilidad , es estar cómodos con nuestras reacciones o conductas.
El tener una autoestima sana permite un equilibrio en nuestra vida y de una u otra manera nos hace más resistentes a los ataques de la sociedad de hoy, en cierta medida ayuda a evitar o manejar episodios de depresión, crisis, ansiedad.
Una persona sana es capaz de:
- Actuar según su propio criterio sin sentirse mal o incomodo cuando los demás no estén de acuerdo.
- Confía en su capacidad para resolver problemas que se le presenten en la vida, sin tener miedo al fracaso.
- Es capaz de Pedir ayuda cuando realmente la necesita.
- Tiene claro que puede ser interesante y valioso para otras personas.
- Cambia su forma de ser o pensar cuando las experiencias vividas le demuestran que estaba equivocado.
- Se considera igual a cualquier otra persona, con virtudes y defectos, pero jamás ni inferior, ni superior a los demás.
De acuerdo a la importancia que tiene en la vida de cualquier ser humano, a continuación te damos una serie de tips para mejorar la autoestima y así no permitir que fuerzas externas afecten el amor propio y por ende la calidad de vida. Recuerda que no solo es quererse un par de días, requiere un proceso de reconocimiento, sinceridad en nuestras fortalezas y debilidades, fuerza de voluntad.
Si no nos queremos, respetamos, valoramos, nadie más lo hará y dejaremos la puerta abierta para que otros te puedan lastimar. La autoestima permite tratarnos bien tanto a nosotros mismos como a los demás. Recuerda que todo progreso empieza por uno mismo.
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1-No compararse con los demás
Cada persona es única, especial e irrepetible, empieza por creer que eres valioso por el simple hecho de ser TÚ. Al compararte simplemente no estas siendo justo con nada, porque cada persona es un mundo, tiene una historia de vida diferente, ha pasado por otras circunstancias que la han llevado a la situación en la que se encuentra hoy en día.
Cada persona tiene sus virtudes, fortalezas y hasta sus propios demonios. Lo que para ti es una fortaleza, lo saber hacer muy bien, para la otra persona quizás no y viceversa. Por ello es tan importante no perder tiempo y energía al compararse, es mejor trabajar sobre sí mismo.
2-El mejor proyecto a trabajar eres tú
Si hay algo que deseas mejorar y que sabes que te apasiona o que te va ayudar a sentirte bien, proponlo como meta a alcanzar, ten en cuenta que debe ser realista, que te motive a trabajar por él y a no terminar dejándolo a medias con una gran frustración, recuerda que para alcanzar cualquier meta es un proceso continuo, de esfuerzo, dedicación. No lo quieras lograr de la noche a la mañana, hay que trabajar todos los días por él.
Organiza, planifica y busca alternativas que ayuden a alcanzar esa meta, mirando hacia arriba pero con los pies en la tierra. Ya sea si quieres emprender un negocio, bajar de peso y escoger un estilo de vida más saludable, mejorar la manera de interactuar con los demás, estudiar lo que realmente te gusta, aprender algún oficio o deporte , etc.
3-Quiérete a más no poder
Trata de hacer actividades que te hagan feliz, salir a comer, ir a cine, dar un paseo, invertir en unas vacaciones, leer un libro, cocinar, bailar. Dormir, dedicar una hora al día a reflexionar o meditar, para saber cómo estamos y en qué momento nos encontramos. Es importante que saques tiempo a la semana para tu bienestar tanto físico como emocional
Háblate con amor, cariño, no te des tan duro, lo importante es aprender con cada error cometido y tener en cuenta que cada día en una nueva oportunidad para crecer, mejorar y seguir aprendiendo. Según el experto en neurociencia cognitiva Luis Castellanos, el lenguaje positivo no solo nos ayuda a mejorar la comunicación, las relaciones con nosotros mismos y con los demás, sino que también está relacionado con la felicidad.