Lograr unas piernas tonificadas es un sueño muy buscado y más por las mujeres, pero, en muchas ocasiones es difícil cumplir con este objetivo incluso poniendo todos nuestros esfuerzos en ello. Pues bien, para tonificar y poner firmes las piernas, debemos de manejar una buena alimentación y estilo de vida saludable. Si vas a empezar a hacer entrenamientos para acabar con la grasa y el exceso de volumen debes tener claro tu objetivo y estar enfocada. Además, si lo que buscas también son glúteos firmes aquí tienes una rutina pensada especialmente para chicas que quieren aumentar y tonificar su masa muscular.
Tener unas piernas tonificadas es el deseo de muchas personas, por ende se considera el mejor encanto físico, tanto en hombres como en mujeres, porque dan la impresión de tener buena salud, energía, vitalidad, además de una buena apariencia. Si eres una de las personas que decidieron activarse en días en donde tienes espacios libres y has recogido información sobre los ejercicios que puedes hacer desde la comodidad de tu casa, ya sea en la sala, el cuarto o en el garaje entonces ya sabrás que hacer desplantes de manera correcta no es complicado, pero si importante manejar una técnica. Si deseas agregar cierto nivel de complejidad a los desplantes, puedes incluir peso con polainas en tus tobillos o avanzar distancia mientras los haces para mayor esfuerzo. Toma unas pesas rusas o barra olímpica y recorre de una distancia a otra.
– Paso 1:
Lleva una pierna hacia delante un buen punto de partida para encontrar una distancia adecuada puede ser en donde tanto tu pierna frontal como tu pierna de atrás quedan a 90 grados entre tu muslo y espinilla. Es importante resaltar que mientras más distancia hay entre nuestros pies mayor será el enfoque a la cadena posterior y mientras más cercanos estén mayor será el enfoque en los cuádriceps, la recomendación es no inclinarte por ninguno solo encuentra tu posición más fuerte y balanceada. Aprieta lo más que puedas el abdomen para mantener la postura.
– Paso 2:
Los expertos sugieren una inclinación hacia el frente durante la ejecución del ejercicio dimensionado como esto puede ser mejor para activar los glúteos y femorales. También asegúrate que tu pie esté bien plantado, es decir, pisa fuerte y es preferible que uses un par de tennis sin tanta suela ya que puede hacer que te desbalancees, también practícalo descalzo. Al momento de bajar evita meter la rodilla, esto es un problema común que se ve bastante en el gimnasio lo correcto es poner la recta. Aquí queremos tener un movimiento controlado y vertical de nuestro torso y piernas bajando lo más cercano al piso que puedas lo importante es hacer el mayor rango de movimiento. Lo anterior debe suceder mientras el abdomen sigue contraído y la espalda recta.
– Paso 3:
Baja la rodilla izquierda hasta el piso e inmediatamente después de hacerlo, con tu propio peso empújate hacía atrás volver arriba. Realiza la fuerza con los glúteos y abdomen. Después repite los mismos pasos anteriores con la otra pierna. Para que mantengas el equilibrio coloca tus brazos cruzados sobre tu pecho y crea este hábito en horarios donde te quede fácil en la mañana, tarde o noche. Tampoco olvides hidratarte con bastante agua durante las sesiones de ejercicio y después.
Es recomendable iniciar con los desplantes estáticos puesto que la mayoría de las personas hacen mala movilidad y estabilidad haciendo que se pierda esta técnica, conforme más se vaya dominando el ejercicio ya se podría considerar el incorporar el hacerlas caminando.
Sentadilla Búlgara: esta variante de desplante ha tomado mucha fuerza en los últimos años ya que han salido varios estudios mostrando como la activación en glúteos y femorales opacan tanto a las sentadillas normales como el peso muerto romano posicionándolo como otro ejercicio para entrenar estos músculos y llevarlo a nuestra rutina de entrenamiento. Es muy similar a la del desplante solo que al tener un pie atrás en el piso nuestro pie estará soportado con algo más arriba por lo general con una banca esto permite mayor trabajo en la cadena posterior. A medida que vayas controlando este ejercicio puedes añadirles dos mancuernas a los lados o incluso una barra de discos.
Recuerda que la técnica es fundamental pulirla y siempre es mejor la calidad que la cantidad.