El colon irritable o también llamado síndrome de intestino irritable es un trastorno que afecta a los intestinos. Incluye una serie de síntomas como dolor abdominal, hinchazón, cólicos, gases, diarrea o estreñimiento. En ocasiones La mayoría de las personas pueden controlar estas molestias al realizar cambios en el estilo de vida. Mientras que los síntomas más graves pueden tratarse con medicamentos y terapia psicológica. Pues estos pueden estar desencadenados por alimentos y niveles elevados de estrés.
No se tiene certeza de cuál es la causa exacta, pero existen algunos factores que parece que pueden influir. Por ejemplo, las contracciones musculares en el intestino, aquellas fuertes y que duran más tiempo causan gases y diarrea. Mientras que las leves pueden ralentizar el paso de los alimentos y hacer que las heces sean duras. La mala coordinación entre el cerebro y el intestino logra que el cuerpo reaccione de forma exagerada a los cambios que se realizan en el proceso digestivo, también puede ser por alteraciones en las bacterias del intestino.
Estilo de alimentación
El tratamiento para este problema de salud se centra en tratar de aliviar los síntomas, para lograr vivir lo más normal posible. Por lo que se deben evitar los alimentos que desencadenan el malestar y consumir aquellos ricos en fibra. También beber bastante líquido, realizar algún tipo de ejercicio con regularidad y dormir lo suficiente durante las noches.
Para identificar los desencadenantes se eliminan ciertos alimentos, luego son reintroducidos uno por uno, con el propósito de determinar cual esta causando los síntomas. También puedes llevar un diario de alimentos y anotar cómo reacciona el cuerpo a ellos. Recuerda que todos responden a los alimentos de diferente manera, lo que para usted puede ser un problema, quizás para otra persona no sea igual. Averiguar que es seguro para comer, a menudo es un caso de prueba y error.
El médico posiblemente le recomiende eliminar los alimentos con alto contenido en gases como las bebidas carbonatadas, el gluten y seguir una dieta baja en FODMAP. Ya que quizás sea sensible a ciertos carbohidratos que se encuentran en algunos cereales, verduras, frutas y productos lácteos. Si los síntomas mejoran, puede ir introduciendo poco a poco los alimentos.
Alimentos que se deben evitar
Como ya lo hemos mencionado, los alimentos que desencadenan el síndrome de intestino irritable son diferentes para cada persona, por lo que no se puede establecer una lista única de aquellos a evitar. Sin embargo, existen algunos que son lo más comunes y de los que hablaremos a continuación.
Alimentos fritos: A menudo causan gases e hinchazón, también debes evitar los alimentos picantes que pueden empeorar los síntomas. En especial en aquellos que padecen de reflujo.
Legumbres: Los frijoles, las lentejas y los guisantes contienen compuestos llamados oligosacáridos que son resistentes a la digestión. Aunque los frijoles aumentan el volumen de las heces para ayudar con el estreñimiento, también ocasionan gases e hinchazón.
Cafeína: Todas las bebidas que contienen cafeína pueden ser un desencadenante, tienen un efecto estimulante en los intestinos que puede ocasionar diarrea.
Alimentos procesados: Dentro de cualquier estilo de alimentación de deben limitar, ya que contienen altos niveles de sal, azúcar y grasas. Aquí se incluye el chocolate que tienen un alto contenido en grasa, azúcar, lactosa, cafeína.
Ajo y cebolla: Pueden ser difíciles de descomponer por los intestinos y ocasionar gases, así como calambres dolorosos. El brócoli y la coliflor también son difíciles de digerir.
Lácteos: Su consumo ocasiona problemas en tu cuerpo debido a un alto contenido en grasas, lo que provoca diarrea.
Cereales como el centeno, trigo y cebada: Contienen gluten que en el cuerpo de algunas personas ocasiona una reacción inmunológica, conocida como enfermedad celíaca o intolerancia al gluten.
Fibra insoluble: La fibra dietética te ayuda a mantener el intestino sano, la fibra soluble es una buena opción para la mayoría de las personas. Pero la insoluble como el salvado de trigo puede empeorar el dolor y la hinchazón.
Alimentos que se pueden consumir
Existen diferentes opciones en el mercado para sustituir aquellos alimentos que quizás producen síntomas en tu cuerpo. Por ejemplo, algunas alternativas sin gluten son la quinoa, sorgo, avena, alforfón, harina de avena y harina de coco. Puedes consumir pescado y otras carnes, huevos, productos lácteos sin lactosa, algunas frutas como plátanos, arándanos, kiwi, naranjas y piña. Verduras como zanahorias, apio, berenjena, judías, verdes, col rizada, calabaza, espinacas, papas. Tofu, semillas de calabaza, sésamo y girasol
