El pollo guisado con verduras es una autentica receta típica de la abuela que todos quieren comer, además de preparar porque es muy económica de hacer alcanzando a varias personas, fácil y relativamente rápida, solo es cuestión de prestarle atención durante los 20 a 30 minutos después es tan solo dejar cocinar. Así que si no sabes qué almorzar o cenar prepara este delicioso pollo guisado, aquí te dejo el paso a paso que debes llevar.
Ingredientes:
- 1 pollo entero o 6 muslos de pollo.
- 1 cebolla cabezona grande blanca.
- 1 pimiento verde.
- 1 pimiento rojo.
- 2 dientes de ajo.
- 200 gramos de tomate triturado.
- 1 o 2 hojas de laurel.
- 1 puñado de perejil picado.
- ½ vaso de vino blanco.
- 1 libra de caldo de pollo.
- Aceite de oliva extra virgen.
- Sal y pimienta al gusto.
Preparación del pollo guisado:
- Inicia calentando una olla a fuego medio con un chorrito de aceite de oliva y cuando este esté bien caliente añade el pollo entero o los 6 muslos para sellar todas sus caras, la idea no es cocinarlo solo dorarlo un poco, de esta manera te aseguras de sellar todos los poros del pollo y que los jugos se mantengan en su interior.
- Pasado alrededor de 3 minutos retira el pollo dorado de la cazuela, una vez que lo bajes del fuego en el mismo aceite y en los jugos que haya soltado la carne añade una cebolla cabezona blanca grande picada finamente en cuadritos, junto con los dos pimentones verde, rojo y los dos dientes de ajo. Para que esta verdura sude y se cocine más rápido agrega una pizca de sal.
- Revuelve y deja cocinar todos los ingredientes a fuego lento por unos 5 minutos.
- Pasado el tiempo con la verdura un poco dura sigue añadiendo más ingredientes, como los 200 gramos de tomate triturado sin la piel, luego sigue mezclando todo mientras sigue a fuego bajo por otros 5 minutos más, tiempo suficiente para que el tomate se deshaga y las verduras se pongan más tiernas.
- Luego de los cinco minutos añade un vaso de vino blanco y sube la potencia del fuego, mezcla todos los ingredientes y deja cocinar durante alrededor de tres minutos más. Con este se logra que el vino blanco se reduzca concentrando todos sus sabores y además que el vapor se evapore.
- Mete nuevamente las presas de pollo en el sofrito y si este soltó jugo mientras se reservaba no olvides en añadírselo porque le va a dar mucho sabor a la preparación.
- Cubre muy bien de agua o mejor de caldo de pollo para que este tenga una salsa espectacular.
- Para preparar el caldo emplea una carcasa de pollo que te haya sobrado otro día, como por ejemplo un pollo asado o de uno crudo, agrega esto en una olla con abundante agua a temperatura ambiente y luego echa verduras de tu preferencia, puede ser cebolla cortada por la mitad, pimiento rojo y verde y una zanahoria.
- Lleva a ebullición y lo primero que ocurrirá es que saldrá una especie de espuma en la superficie, así que retíralo con ayuda de un cucharon porque son desechos y no interesa que estén en la receta. Añade más ingredientes como las especias: una hoja de laurel, tomillo, pimienta negra en grano y una cucharadita de orégano.
- Tapa y deja cocinar todo por una hora a fuego bajo, pasado ese tiempo simplemente cuela el agua o licúa y ya está hecho el caldo de pollo.
- Mezcla todos los ingredientes mientras entra en ebullición y cocina durante 45 minutos más a fuego medio, este es el tiempo suficiente para que la salsa reduzca y para que el pollo quede bien cocido.
- Cuando ya la salsa tenga una textura aterciopelada que casi se adhiere al pollo, está lista para servir acompañada con arroz, ensalada de aguacate o con lo que más te guste.
Consejos y tips:
- Puedes quitarle la piel al pollo si no te gusta o dejársela a la hora de hacer el guiso, solo recuerda que esta le aporta un sabor más exquisito y además es rica en grasas saludables.
- Si quieres añadirle papa a esta receta puedes agregarle 2 papas picadas en cubos medianos sin cáscara junto con las verduras, lo mismo si quieres ponerle champiñones frescos con 150 gramos de estos picados en láminas.
- Es un plato para acompañar como dije anteriormente con arroz blanco porque el guiso del pollo queda con bastante salsa.