Una infección urinaria es aquella que se origina en cualquier zona del sistema urinario, ya sea los riñones, uréteres, o vejiga. Esta enfermedad afecta más a la mujeres que a los hombre debido a su anatomía, la infección en la vejiga puede ser dolorosa y si no se trata a tiempo se contagian los riñones.
Cuando los síntomas aparecen, la mayoría de los especialistas en la salud indican el consumo de antibióticos. Aunque existen formas naturales de prevenir la llegada de una infección urinaria al organismo.
Síntomas de una infección urinaria
- Necesidad de orinar con mayor frecuencia y en pequeñas cantidades
- Sensación de ardor al orinar
- Irregularidades en el color y olor de la orina, que puede llegar a ser fuerte, turbia, rojiza o rosado brillante.
- Dolor en el centro de la pelvis y alrededor del hueso púbico
Tipos de infecciones según la parte afectada
- Vejiga-cistitis: Produce molestias en la parte del abdomen bajo, al igual que presión pélvica, micción dolorosa y presencia de sangre.
- Uretra-uretritis: En algunos casos no produce síntomas o estos pasan desapercibidos, por lo general se presenta ardor al orinar.
- Riñones – pielonefritis aguda: Es la más grave de todos y su aparición produce vómito, escalofrío, fiebre y dolor en la espalda o al lado.
Consejos para prevenir las infecciones urinarias
- Beber abundante agua, ya que favorece la producción de orina
- Orinar inmediatamente y no aguantarse las ganas
- Consultar con el médico la mejor opción para usar métodos anticonceptivos, ya que algunas personas pueden ser más propensas a desarrollar infecciones
- A la hora de ir al baño, limpiarse los genitales de adelante para atrás, porque si se hace lo contrario, se arrastran los gérmenes de la zona anal a la vaginal
- Orinar despues de tener relaciones sexuales, debido a que durante el encuentro se comparten gérmenes y provocan infecciones urinarias exclusivas de esta acción.
- No limpiar la zona de manera excesiva ya que se facilita el ambiente para que se reproduzcan microorganismos dañinos, al arrasar con los buenos.
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1-Jugo de arándanos o moras
Es el remedio más usado para prevenir y combatir las infecciones urinarias, gracias a sus propiedades antibióticas para mantener un aparato urinario sano. Solo necesitas triturar en la licuadora la fruta con un poco de agua y consumir de 2 a 4 vasos de jugo al dia.
2-Jugo de apio y piña
Contiene grandes propiedades para el organismo como la enzima bromelina presente en la piña, además de refrescar y purificar. Solo se necesita agregar al vaso de la licuadora 3 litros de agua, 2 rodajas de piña previamente picada, 2 tallos de apio y 1 taza de té de manzanilla. Triturar todo y beber en ayunas.
También se pueden consumir algunas frutas que ayudan a prevenir la aparición de la infección, como el banano y la manzana todos los días durante una semana. Al igual que consumir una taza de sandia por dia, ya que su contenido en agua y nutrientes permite limpiar los riñones
3-Té de rábano picante
El rábano contiene propiedades que le permiten ser antiséptico, antimicrobiano y antiinflamatorio al reducir la cantidad de bacterias en el sistema urinario.
Solo se debe hervir una taza con agua y agregar hojas secas de rabano, dejar reposar por 5 minutos, colar la bebida y consumir 1 o 2 tazas al día.
4-Baño con vinagre
Este es otro remedio común, que ha sido transmitido de generacion en generacion por sus cualidades antimicrobianas. El baño de asiento con vinagre se realiza al colocar 3 litros de agua tibia en un recipiente limpio y mezclar 2 cucharadas de vinagre. Luego lavarse la zona íntima con el líquido o sentarse en el recipiente con el agua durante 20 minutos.
5-Ajo y cebolla
El ajo tiene propiedades antibacterianas y sus beneficios se obtienen al pelar dos dientes de ajo y machacarlos bien. Después añadirlos a una taza con agua caliente y dejar reposar por algunos minutos. Consumir 3 veces al dia hasta que los síntomas desaparezcan.
En cuanto a la cebolla también tiene propiedades diuréticas y antibacterianas, solo debes pelar una cebolla y cortarla en 4 trozos. Luego ponerla a hervir en medio litro de agua por 20 minutos y dejar reposar alrededor de 8 horas. Por último colar y consumir.
