¿Quieres deshacerte de un mal hábito? Aunque no es una tarea para nada simple, existen algunas estrategias sencillas que puedes tener en cuenta a la hora de lograr el objetivo y hacer que este se mantenga. Recuerda que es un proceso y no ocurrirá de la noche a la mañana, el tiempo para romper con un mal hábito dependen de varios factores. Estos incluyen por cuántos meses se ha vivido con él, si se ha integrado por completo en tu vida, qué recompensas sociales, físicas o emocionales se obtienen, incluso si otras acciones refuerzan el hábito.
Un hábito es una conducta repetida regularmente y que por lo general requiere un mínimo de pensamiento, lo que ayuda ahorrar tiempo y por ello es más difíciles de cambiar. Recuerda que los valores, ideas, sentimientos y experiencias determinan los hábitos en cada persona, ya sean positivos o negativos. Para acabar con esos hábitos que están afectando negativamente tu vida puedes seguir cada una de las recomendaciones que se ofrecen a continuación. Aunque ante problemas mayores lo mejor siempre será buscar ayuda de un especialista en el tema.
Cómo romper un hábito
1-Identifica los desencadenantes
Empieza por tratar de dedicar algunos días para rastrear el hábito y si este sigue un patrón. Por ejemplo, en dónde ocurre, a qué horas, cuáles son tus sentimientos en ese momento, que sucede después o si existen otras personas involucradas en la situación. De esta manera identificarás qué es lo que impulsa la realización de ese mal hábito y cuáles serían las posibles soluciones a tener en cuenta para lograr eliminarlo de tu vida.
2-Escribe los motivos por los que quiere cambiar
Tómese algunos minutos en pensar sobre las razones que lo motivan a querer cambiar y todos los beneficios que podrás obtener. Trata de escribirlos en una hoja para que la situación se sienta más real, además el tener que enumerarlos te ayudará a pensar en otros que antes no se te habrían ocurrido. Para aumentar esa motivación pégalos en el refrigerador, el baño u otro espacio que veas con regularidad y así lo tendrás fresco en tu mente.
3-Reemplaza el hábito por uno diferente
En lugar de simplemente evitar el hábito, que solo aumenta la probabilidad de recaer, lo mejor es reemplazarlo con otro hábito que sea beneficioso. A medida que repites ese nuevo comportamiento, será más fácil continuar con la rutina y ver resultados positivos aumenta la necesidad de seguirlo haciendo. Un ejemplo de ello es que si quieres dejar de buscar dulces entre comidas, en lugar de evitarlos y no comer, tenga a la mano frutos secos.
4-Crea un entorno ideal
Tu entorno puede ser tu mejor aliado o peor enemigo. Si estás tratando de comer más saludable debes permitir que tu refrigerador, despensa, cocina y todos los rincones del hogar están libres de productos ultra procesados. Deja a la vista las verduras, frutas y alimentos nutritivos para evitar caer en la tentación. Quizás quieras dejar de pedir tanta comida a domicilio, ya que no es muy saludable o estás gastando demasiado dinero. Pero todos los menús de los restaurantes están a la vista en refrigerador, para ello intenta pegar copias de recetas sencillas.
5-Busca el apoyo de un amigo
Romper un hábito no tiene que llevarse en solitario, un amigo, familiar o la misma pareja puede acompañarte en el proceso si ambos comparten ese deseo. De esa manera es más fácil lidiar con la situación y mantenerse encaminado, pues es una forma de animarse el uno con el otro. Un amigo también es un gran apoyo aunque no tenga un hábito que cambiar, ya que puede ser de gran ayuda en las dudas o cuando esté volviendo a lo mismo.
6-No sea tan duro
Es probable que cometas varios errores en el camino de romper un hábito y experimentes sentimientos de frustración y fracaso, a tal punto de preguntarse si serás capaz. En lugar de solo enfocarse en lo negativo, piensa en los pequeños logros que has tenido y en que cada día es una nueva oportunidad para hacer las cosas mejor. De esta manera seguirás luchando por el objetivo y no en darte por vencido en tan poco tiempo.
7-Empieza poco a poco
Lo mejor es empezar a cambiar un hábito a la vez, a menos que algunos vayan de la mano, como dejar de fumar y beber. Esto aumenta la probabilidad de éxito que querer cambiar muchas cosas al mismo tiempo, siguiendo la idea de un yo nuevo o mejorado. Debes ir un paso a la vez y no hacerlo todo en un mínimo de tiempo. Por ejemplo, si quieres dejar los refrescos en las comidas, una buena opción es tratar de no incluirlos solo en la cena.
8-Deja recordatorios
Usa varias notas de papel para que sirvan como una forma de recordatorio visual en los lugares en los que creas que más ocurre el comportamiento. Esto te ayudará en pensar en dicha acción cuando algo la desencadena. Incluso puedes usar varias alarmas en el teléfono para que te indiquen llegada la hora lo que deberías hacer.
9-No te olvides del cuidado personal
Priorizar el propio bienestar aumenta las probabilidades de éxito, esto al ayudarte a seguir luchando contra los desafíos que se presenten en el camino. Es una forma de liberarte del estrés y recargarte para todo lo que se requiere. Trata de tomarte el tiempo en tener un sueño reparador, incluye un pasatiempo sano o actividad de relajación que mejore el estado de ánimo. Realiza algún tipo de deporte para mantener el cuerpo activo.
10-Busca ayuda profesional
Es probable que puedas romper muchos hábitos por sí solo si le inyectas todo tu esfuerzo. Sin embargo, existen temas más profundos que requieren la guía de un profesional para que tengas éxito, sobre todo cuando se trata del abuso de alcohol o la alimentación emocional. Esa persona te puede ayudar abordar el problema de raíz.