Cuando se trata de obtener un bienestar físico, los alimentos que pones en cada plato pueden tener un impacto significativo. Lo que comemos le proporciona al cuerpo lo necesario para funcionar de la manera correcta, de lo contrario la salud empieza a deteriorarse. Elegir alimentos nutritivos ayuda a reducir el riesgo de enfermedades a corto y largo plazo. También proporciona la energía para todas las actividades diarias y logra controlar el peso.
Recuerda que cuando privas a tu cuerpo de lo que en realidad necesita, esto lleva a la mala nutrición y hábitos alimenticios que causan diabetes, aumenta los factores de riesgo de accidente cerebrovascular, enfermedades cardíacas y cáncer. La mala nutrición también se debe a comer en exceso, si consumes más calorías de las que quemas, con el tiempo provoca aumento de peso hasta llegar a obesidad. En conclusión, la nutrición deficiente afecta tu bienestar al reducir la capacidad de mantener una vida larga, más activa y por supuesto, agradable.
Relación de los alimentos con el bienestar
Como ya te lo hemos mencionado, los alimentos tienen grandes efectos en tu salud y calidad de vida. Aunque comer de manera saludable es bastante simple, con el aumento de las “dietas” de moda y diferentes tendencias dietéticas se ha creado demasiada confusión. Esto en lugar de favorecer el bienestar puede perjudicar a muchos.
Una de las grandes reglas a tener en cuenta es que, si no puede verse a sí mismo siguiente una determinada dieta durante mucho tiempo, entonces no es la adecuada para usted. Seguir dietas extremas es algo que no se puede mantener, lo ideal es desarrollar hábitos alimenticios a largo plazo y como siempre, el equilibrio es clave.
¿Por qué comer sano?
Muchas de las investigaciones han relacionado a las enfermedades graves con una alimentación deficiente. De hecho, comer sano puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y cáncer, que son las principales causas de muerte en el mundo. También puede mejorar la función cerebral y el rendimiento físico, ya que la comida afecta a todas las células y órganos. Si haces deporte, sin duda una buena dieta ayudará a que te desempeñes mejor.
Otros de los beneficios que se obtienen con una buena alimentación es que tu salud intestinal puede mejorar, esto al permitir que las bacterias buenas prosperen en el colon. Te ayuda a mantener huesos, dientes fuertes y evitar la caries, promueve una mejor salud de la piel, del cabello y las uñas, así como protege la salud ocular.
¿Qué debo hacer?
La alimentación debe ser equilibrada, que incluya una variedad de nutrientes en las porciones adecuadas, pero si se tiene objetivos particulares la dieta debería ser acorde a ello y bajo la guía de expertos. Aunque el conteo de calorías no siempre es necesario, la ingesta total aún juega un papel importante en el control del peso y la salud.
Si consumes más calorías de las que quemas, se almacenarán como nuevo músculo o grasa corporal, mientras que, si consume menos de la que quemas a diario, entonces perderás peso. Si deseas adelgazar, es probable que debas crear un déficit de calorías y aprendas a controlar las porciones, pero si está tratando es de ganar peso o aumentar la masa muscular, necesitas comer más de lo que el cuerpo quema, claro que con alimentos nutritivos.
Alimentos integrales
Lo ideal para obtener un bienestar físico es que intentes consumir alimentos integrales por lo menos en un 80% del tiempo. Cuando se habla de “alimentos integrales” se refiere a los alimentos naturales y no muy procesados.
Este tipo de alimentos son ricos en nutrientes y tienen menos calorías por porción en comparación a los que distribuyen las fábricas. Los alimentos procesados tienen poco valor nutricional y a menudo es lo que denominan “calorías vacías”, por lo que comerlos en grandes cantidades y con regularidad se ha relacionado con obesidad y el desarrollo de múltiples enfermedades. Consume más fruta, verduras, carne magra, pescado, huevos, nueces y semillas, frijoles y legumbres, almidones saludables, grasas saludables, hierbas y especias. Beba agua, té o café.
