La sal es un producto que se utiliza diariamente para condimentar nuestras comidas, debido a esto resulta ser un elemento principal en las mesas de las familias.El abuso de este tipo ocasiona hipertensión arterial.
Prescindir de la sal en los alimentos puede llegar a volver insustanciales nuestros platos, sobre todo para aquellos que están acostumbrados a coger un buen pellizco de este condimento mientras están cocinando. Sin embargo, disminuir su ingesta es posible.
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Sigue estos consejos para disminuir el consumo de sal en sus comidas:
- Dejar la condimentación para el final. Al cocinar un filete, por ejemplo, es mejor colocar el aliño a último momento; así nos evitaremos añadir más sal de la necesaria. Igual para los guisos, pues con el reposo se concentran los sabores, y es mejor rectificar al final.
- Fijarse bien en las etiquetas de los productos que compramos. Por cierto, sodio no es sinónimo de sal; así que, cuando en las etiquetas se muestre “tantos gramos de sodio”, hay que multiplicarlos por 2,5, y entonces sabremos con exactitud qué cantidad de sal contiene un determinado alimento.
- Usar sal marina. Esto es muy recomendable, pues su sabor es más fuerte y permite utilizar menor cantidad.
- Comer más alimentos frescos, ya que su grado en sodio es menor; limitemos el consumo de comidas muy procesadas y saladas (patatas fritas, por ejemplo).
- Fijarse bien en las etiquetas de los productos que compramos. Por cierto, sodio no es sinónimo de sal; así que, cuando en las etiquetas se muestre “tantos gramos de sodio”, hay que multiplicarlos por 2,5, y entonces sabremos con exactitud qué cantidad de sal contiene un determinado alimento.