La glándula tiroides es importante para el funcionamiento adecuado del cuerpo, ya que es la encargada de segregar hormonas. Las cuales influyen en el crecimiento, el metabolismo, la frecuencia cardiaca, presión arterial, temperatura corporal entre otras funciones y dependiendo de la cantidad de hormonas, así mismo serán los síntomas en el cuerpo, ya que puedes sentirte muy activa o cansada, asi como subir notoriamente de peso o bajar sin razón aparente.
¿Qué es el cáncer de tiroides?
En cuanto al cáncer es aquel que se origina en la glándula tiroides ubicada en el cuello, caracterizada por la forma de mariposa. La enfermedad se desarrolla cuando las células empiezan a crecer sin control, afectando más a las mujeres que a los hombres.
Según la organización mundial de la salud, afirma que cada año esta enfermedad causa la muerte de 8, 2 millones de personas alrededor del mundo. Siendo las mujeres más propensas, ya que una de cada ocho sufren de un problema de tiroides a lo largo de su vida. Algunos de los factores de riesgo son los antecedentes familiares, edades entre los 25 y 65 años. Además de haberse expuesto a radiaciones en alguna etapa de la vida y una dieta baja en yodo.
Tipos de cáncer de tiroides
Existen distintos tipos de cáncer que indican la gravedad de la situación y el adecuado tratamiento.
- Papilar: Es uno de los más comunes, crece lentamente y se desarrolla a través de las células foliculares, por lo general se encuentra en un lóbulo y bajo un microscopio se parece al tejido normal de la tiroides.
- Folicular: También se desarrolla a partir de las células foliculares, es menos frecuente que el cáncer papilar y raramente se disemina a los ganglios linfáticos.
- Medular: Este tipo de cáncer tiene poca similitud con el tejido normal de la glándula tiroides, y se puede controlar si su diagnóstico, al igual que el tratamiento ocurre a tiempo, antes de que se disemine a otras partes del cuerpo
- Anaplásico: Solo representa el 1% de los cánceres de tiroides presentes en el cuerpo, por lo que su presencia se considera poco frecuente. Su crecimiento es rápido y puede subdividirse en células gigantes, lo que permite que sea difícil de tratar.
Síntomas del cáncer de tiroides
La mayoría de este tipo de cáncer se encuentra de forma casual tras una exploración, dando como resultado una forma de nódulo, palpable e indolora, que puede ocasionar problemas para tragar o la voz se vuelve ronca. Entonces algunos de los síntomas que puede generar, cuando la enfermedad está más avanzada son:
- Ganglios linfáticos inflamados
- Dolor en el cuello y la garganta
- Dificultad para consumir alimentos
- Cambios de voz
- Aparición de un bulto que puede sentirse en el cuello a través de la piel, pero la mayoría no son cancerígenos, de igual manera el médico puede solicitar varios exámenes.
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¿Cómo puede afectar la vida de la persona?
Indiscutiblemente la aparición de alguna masa en nuestro cuerpo, es signo de alarma y puede afectar no solo la parte física sino emocional. Pero la mayoría de los bultos en esa zona son benignos. Lo importante es acudir lo más pronto posible a un médico especialista para su diagnóstico y con mayor rapidez si ha padecido problemas de tiroides en el pasado o algún familiar ha pasado por dicha situación.
Además la situación afecta la posibilidad de lograr un embarazo, ya que los problemas relacionados con la glándula tiroides, alteran el equilibrio de las hormonas encargadas de la ovulacion, asi como el ciclo menstrual, haciendo que sean más dolorosos e irregulares.
Entre los posibles tratamientos se encuentra una intervención quirúrgica para extirpar, si el tumor es pequeño y todavía no ha hecho metástasis. Además el especialista puede complementar con una terapia de yodo radiactivo que destruye las células que no se hayan podido eliminar con la cirugía.
