Los arándanos ayudan a neutralizar la acción de los radicales libres que son nocivos para el organismo. Estas frutas previenen la aparición de enfermedades del corazón y de otras enfermedades como el cáncer.
Tónicas y gastroprotectivas. Facilitan la digestión.
Previenen los trastornos visuales asociados con la diabetes de tipo II, ya que contienen sustancias que reducen el contenido de glucosa en la sangre. En combinación con la vitamina E, es muy eficaz para prevenir y para frenar el avance de las cataratas.
Son buenos para tratar dolencias como las malas digestiones, la diarrea, las inflamaciones intestinales o la gastroenteritis, ademas los arándanos previenen las infecciones urinarias y, además previenen la formación de cálculos de fosfato cálcico.
Contienen, además, una sustancia que ayuda a fortalecer el colágeno, una proteína muy importante presente en los ligamentos, tendones y cartílagos. Por eso, son útiles para el tratamiento de enfermedades como la artritis y la artrosis.
Los arándanos son frutas con escasos hidratos de carbono y ricas en vitamina C. También son ricas en potasio, hierro y calcio pero, lo más característico, son sus antocianos y carotenoides, pigmentos naturales de acción antioxidante.
composición por 100gr de porción comestible:
- Calorías: 30,1
- Hidratos de carbono: 6,9g
- Fibra: 1,8g
- Potasio: 88mg
- Magnesio: 0,5mg
- Provitamina A: 12mcg
- Vitamina C: 17mg
- Vitamina E: 5mg
- Tipos de arándanos
- Existen diferentes tipos de esta fruta del bosque:
Negros o americanos. Los frutos son de color negro azulado y más grandes que los arándanos comunes (6,5-12,5 milímetros de diámetro). Son más ricos en vitamina C.
Rojos o agrios. Son pequeñas bayas de color rosa pálido, muy populares en el norte de Europa, norte de Asia y norte de Norteamérica.
Rojos pequeño. La planta tiene hojas triangulares y son originarios del norte de Europa y de Asia.
Rojos americano. Originarios del este de Canadá y Estados Unidos. Su sabor es parecido al sabor de la manzana.
A la hora de elegir los arándanos, es conveniente que nos fijemos en su color y textura. Los de mejor calidad son brillantes y de color intenso, secos y firmes al tacto. Los arándanos blandos y húmedos se estropean antes.
Para que se conserven mejor, es preferible si separas los arándanos mohosos de los frescos. Tira a la basura aquellos que tengan un moho blanco y velloso o los que estén demasiado blandos. De este modo, evitamos que los arándanos en buen estado se pongan malos antes.
Intenta que permanezcan secos. La humedad hace que les salga moho demasiado pronto, por eso es mejor asegurarnos de que están secos antes de guardarlos. Si tienes un centrifugador de ensalada, colócalos en él con papel de cocina y dale vueltas hasta que no les quede nada de humedad. También puedes extenderlos en una bandeja y dejarlos secar al aire libre.
Con información de: ozeano
