Una de las partes de la casa o de la oficina que más tiene contacto con el público son las puertas, razón por la cual es importante mantenerlas limpias si queremos que siempre luzcan como nuevas, pues la madera en el hogar tiene un encanto único que le da un atractivo especial reflejando la calidez, elegancia y buen gusto. Aquí te dejo 4 pasos fáciles sin recurrir a productos tóxicos con alternativas naturales y ecológicas que puedes emplear.
1- Eliminar el polvo:
Puede que no notes el polvo en las puertas, pero si pasas un dedo verás que existe, pues con el paso del tiempo se va aumulando la mugre, así como también las telarañas. Para mantenerlas limpias quita el polvo al menos una vez al mes, pero no emplees productos que puedan dañar la pintura.
- Pasa por toda la superficie de la puerta de extremo a extremo un trapo o paño preferiblemente de microfibra seco o humedecido con un limpiador eficiente. Las microfibras funcionan muy bien para esto, puesto que es un material absorbente y duradero que retira el polvo como si fuese un imán incrementando su eficacia cuando los mojas.
- Frota sobre la puerta de madera y si no consigues quitar todo recuerda humedecer.
2- Limpieza:
Utilizar productos ecológicos que no sean abrasivos con el material de la puerta es la mejor opción, pues de lo contrario puede perjudicar la madera a largo plazo. Así que utiliza agua y jabón neutro junto con el paño de microfibra o algodón para realizar esta limpieza, es importante que los uses en todos los casos salvo en los que las puertas sean lacadas o con pintura especial, en las que es más recomendable usar productos específicos para su mejor conservación.
Te recomiendo ingredientes o productos naturales ecológicos más no los que contienen ácidos para efectuar una excelente limpieza y no dañar las superficies. En el caso de las manillas y los marcos desinfecta mínimo cada semana por la cantidad de gérmenes que acumlan.
- Alcohol inorgánico o un disolvente universal: humedece una toalla limpia con este producto y pásala por la puerta haciendo hincapié en las manchas más complicadas, y en el caso que la madera esté rayada no olvides seguir el curso de este.
- Cera específica para muebles: este procedimiento no solo ayuda a limpiar sino que hará que las puertas vuelvan a lucir como antes y con brillo desde la primera pasada.
- Polvos de talco: quita la grasa incrustada y deja actuar unos minutos para después retirar con un paño húmedo, agua y jabón neutro.
- Agua de limón y vinagre: estos también son otros productos recomendados para eliminar la suciedad y hacer brillar la madera.
3- Vinagre blanco:
El vinagre blanco es un potente limpiador capaz de mantener la casa limpia de manera natural y sin dañar el medio ambiente. Su composición a base de ácido acético lo convierte en un producto eficaz para limpiar la grasa, desinfectar, desincrustar, dar brillo, etc.
- Mezcla 1 vaso de vinagre con 1 litro de agua para crear tu producto multiusos natural.
- Luego, toma un paño de microfibra y rocía la solución que has preparado allí.
- Procede a frotar sobre las superficies en el sentido de madera.
- Puedes reforzar este truco con la ayuda de media papa para absorber totalmente la suciedad.
- Finalmente, limpia con un paño seco para hacer brillar la madera.
A este método puedes agregarle ½ taza de aceite vegetal o de oliva, nuevamente sumergir el trapo, exprimir y limpiar el resto de los muebles de madera, dejar actuar por 30 minutos y secar con papel absorbente.
4- Jabón de Marsella:
El jabón de Marsella es uno de los más tradicionales y sirve para casi todo, además de que es práctico, funcional, no contiene químicos tóxicos, reduce el impacto medioambiental y tiene un precio asequible. Este es un producto excelente para conservar las puertas de madera.
- Disuelve en un balde con 4 litros de agua el jabón Marsella. Puedes cortarlo en pequeños trozos para facilitar el proceso.
- Después mojar un paño de microfibra, escurrirlo y pasarlo por la superficie de la puerta para eliminar toda la suciedad.
- Puedes optar por la leche utilizando 1 vaso de esta más 2 litros de agua. Mezclar bien y humedecer el paño de algodón para fregar suavemente las puertas de madera y lograr un acabado limpio y brillante.