El diálogo es una parte importante en una relación de pareja. Sin embargo en muchas ocasiones es necesario medir nuestras palabras. sin importar la confianza que haya entre las dos personas siempre es fundamental ser prudente con lo que decimos para no lastimar a nuestra pareja con nuestros comentarios.
Como afirma la psicoterapeuta Judy Ford la amabilidad es una habilidad que deberíamos aprender. Y es que con el calor de algunas conversaciones herimos a nuestro compañero, simplemente porque creemos que estamos haciendo una apreciación sobre lo que ha hecho o dicho. En realidad algunas veces no has notado pero tu pareja se siente incómoda y molesta.
Sin darte cuenta de has metido en un problema sin querer y lo peor de todo y aunque no lo creas esas pequeñas palabras en un periodo a largo plazo terminan por destrozar tu relación. Por eso piensa muy bien lo que vas a decir cuando estés en una discusión y recuerda guardar la calma y ser prudente ante un discusión.
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Tan poco te preocupes de a mucho, los conflictos son parte de una relación. Lo más importante es aprender a medir las palabras y el tono que se usa para decirlo, para evitar problemas a largo plazo. Evita utilizar ciertas frases y evita hacer sentir mal a tu pareja.
Estas son las 10 frases que no debes decirle a tu pareja si quieres evitar conflictos a futuro.
1-Eres como tu madre (padre, algún familiar)
Por ningún motivo debes sacar los rasgos negativos de sus familiares a relucir. Segun la psicoterapeuta Julie Orlov es menospreciable involucrar los peores rasgos de la familia en una conversación de pareja. Así que la próxima vez que pienses en decir algo por el estilo, detente y piensalo dos veces.
Así que si estás acostumbrado a decirle a tu pareja cada vez que discuten: ” igualito fulanito o sutanito, tanto que lo critica y mire”, piensalo dos veces, porque es un error fatal.
La psicoterapeuta Judy Ford sugiere dejar a un lado el insulto y pedir la petición de una forma razonable. Por ejemplo si tu pareja deja los zapatos tirados no empieces a compararlo con alguien de su familia, por el contrario pide con amabilidad que los deje en su lugar para evitar desorden.
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2-Evita utilizar frases que involucren “Nunca” o “Siempre”.
No hay posibilidades de tener una conversación saludable si se hacen acusaciones tajantes el uno al otro, afirma la terapeuta familiar Virginia Gilbert. Es importante evitar el uso de nunca y siempre, pues este tipo de palabras indisponen a tu pareja y la conversación toma un tono negativo. Además este tipo de palabras ponen a la defensiva a la otra persona y hace que se ofusque.
Como solución, opta por hablar de el tema específico y evita generalizar. Si la acción por la que se entabla la conversación es un problema frecuente, habla con tu pareja, expresale tu desagrado y pregúntale si desea cambiar la situación.
Según Judy Ford la mayoría de hombres y mujeres están dispuestos a cambiar cualquier cosa, si se lo pides con amor, tu pareja hará el cambio si te hace feliz.
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3-La palabra “te lo dije” en la relación de pareja
Evita alardear de tu sabiduría y procura no acusar a la otra persona por haber fracasado en algo, así no le vaya tan bien como le hubiese ido si hubiese tomado tu consejo.
Imaginate si te molestaba que tus padres te dijeron la típica frase te lo advertí, cuanto más le molestara a tu pareja que lo hagas. A nadie le gusta que en lugar de apoyarlo lo traten como tonto, así que evita poner en ridiculo a tu pareja.
4-¿Vas a volver a salir con ellos?
Nadie puede obligarte a querer a los amigos de tu pareja, y peor aún fingir que simpatizas. No hay nada más molesto para una persona que escuchar críticas sobre la elección de sus amigos y que le grites en la cara lo despreciable que son. Asi como tienes tus amigos, tu pareja tiene el mismo derecho de hacerlo.
El hecho de estar casado o convivir como pareja no significa que todo lo tenga que hacer juntos, es importante que cada uno tenga su espacio.
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5-¿Que me decias?
Fingir que escuchas a una persona y en realidad no hacerlo, es un plan de escape para tus reuniones de trabajo, afrontar amistades molestas o comidas familiares incómodas. Sin embargo nunca utilices ese comodín con tu pareja.
Con el tiempo la otra persona sentirá que no te interesa lo que te cuenta o lo que piensa, de nada servirá hablar con alguien que no se preocupa por ti.
Si estás preocupado por tus cosas como para escuchar a la otra persona es porque no te interesa lo que pase. Toma un tiempo por mínimo que sea para escuchar a tu pareja.
6- “No exageres”
Refrenar los sentimientos de tu pareja y tratarla como loca, desde tu modo de ver las cosas, haya perdido la razón con las cosas que dice, esto solo hará que se ponga furiosa y la defensiva y prefiera quedarse callada por orgullo o por pereza de tener que defenderse ante tus malas palabras.
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