La actividad física y el deporte deberían ser pilares básicos en la vida de un niño, ya que su práctica estimula la educación y el crecimiento infantil. Los deportes para niños tienen muchos beneficios en la salud física y mental de estos a corto y largo plazo. Por un lado, ayuda a aumentar la flexibilidad y a desarrollar una buena postura corporal; por el otro, favorece la integración y las habilidades sociales de quienes los practican.
6 deportes para niños: fomentar el amor por el ejercicio
Fomentar el amor por el ejercicio desde temprana edad favorecerá el desempeño atlético del niño o los niños con el paso de los años. A continuación te dejamos una lista de los deportes idóneos por los que optar para introducir a los niños al mundo de los ejercicios.
1- Natación
La natación es uno de los deportes más populares a nivel mundial, esto es porque es uno de los deportes más completos que existen. Cuando nadas, estás ejercitando todos los músculos del cuerpo y esto lo hace muy beneficioso para los niños en etapa de crecimiento. Es un deporte muy recomendado para introducir a niños entre los 3 y los 5 años.
A través de la natación, los pequeños podrán mejorar ciertas capacidades como la resistencia y la coordinación. En este deporte se trabajan aspectos importantes como la disciplina y el compromiso. Entre todos de sus beneficios está corregir o prevenir posibles problemas posturales desde temprana edad, y sus efectos sobre la salud mental se reflejan en que ayuda a disminuir la ansiedad y el estrés, debido a que el cuerpo se relaja en contacto con la calidez del agua.
2- Artes marciales
Las artes marciales como el judo, el karate o el taekwondo son altamente recomendadas en la niñez, entre los 4 y 7 años de edad. Como es un deporte individual, fomentará valores como la disciplina y la autoestima. En cuanto a los beneficios físicos que los pequeños podrán obtener de practicar este tipo de deportes está el perfeccionamiento de la coordinación de los movimientos del cuerpo y la flexibilidad.
3- Baloncesto
Se aconseja que los niños que se inicien en este deporte tengan al menos 7 años de edad, ya que es un deporte grupal que requiere mucho más compromiso y autoestima por parte del pequeño. Los niños que practican baloncesto podrán mejorar sus capacidades de trabajo en grupo y relacionamiento, debido a que formarán parte de un equipo en el que todos tendrán el mismo valor en la cancha. También desarrollarán de forma notable la agilidad, la coordinación y los reflejos.
Lo mejor de practicar baloncesto es que es un deporte que se puede jugar tanto al aire libre, como en un lugar cerrado, por lo tanto los niños podrán disfrutar de este todos los días del año.
4- Fútbol
Este es uno de los deportes de grupo más populares, sino es el más popular, y conocido por grandes y chicos. Se recomienda introducirlo a los niños que superen los 7 años de edad para sacarle mejor provecho. Entre sus beneficios en la salud física de los niños se encuentran: el desarrollo de la capacidad de atención, la capacidad lógica y la visión periférica; el favorecimiento de la resistencia aeróbica, la velocidad y la potencia muscular de las piernas; y el aumento en la densidad ósea. Por otro lado, el fútbol fomenta el compañerismo y el respeto mutuo.
5- Atletismo
Este deporte individual requiere mucha más exigencia física por parte de los niños, por lo que se recomienda practicarlo a partir de los 8 años en adelante. El atletismo presenta mejoras físicas en el desarrollo del cuerpo del niño, en la coordinación y la resistencia. En el ámbito personal, el atletismo aumenta la autoestima y el afán por la superación.
Una de las cosas que más resaltan de este deporte es que es un deporte completo y que tiene muchas variaciones según el gusto propio, por ejemplo los niños podrán practicar carreras, saltos o lanzamientos.
6- Ciclismo
El ciclismo tiene muchos de los beneficios que aporta el atletismo como un deporte recomendado para niños un poco más crecidos. Se aconseja introducirlo a los pequeños a partir de los 6 años de edad. Entre sus beneficios físicos se encuentra el incremento de la agilidad, la coordinación y la resistencia. Por otro lado, y de manera más personal, ayuda a reforzar la autoestima.