Te diste el lujo de comerte un trozo de torta de chocolate en tu cumpleaños e incrementó tu total diario de calorías muy por encima del promedio? No te sientas culpable. Un estudio señala que es probable que compense después, lo que causa un aumento neto insignificante.
Resulta que el sistema de retroalimentación de nuestro organismo no lleva la cuenta de las calorías que entran y las que salen con la precisión que creen algunos expertos, señala Kevin Hall, PhD, fisiólogo de los Institutos Nacionales de Salud (NIH), que presentó sus hallazgos en la reunión de la Sociedad para la Obesidad (Obesity Society) en San Diego.
”En lo cotidiano, puedes variar tu ingesta de alimentos en más o menos 600 calorías diarias y aún así tener un peso corporal estable, siempre y cuando tu ingesta de calorías promedio a largo plazo no aumente o disminuya demasiado”, asegura Hall a WebMD.
Comer en exceso y cambios en el peso
Hall y su colega, Carson Chow, PhD, también del Instituto Nacional sobre la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y del Riñón de los NIH, creó un modelo matemático para determinar la precisión del mecanismo de retroalimentación del organismo para manejar la ingesta de calorías que fluctúa ampliamente y el nivel de actividad que la mayoría experimenta.
“Usamos nuestro modelo matemático del metabolismo humano y lo alimentamos con fluctuaciones diarias de calorías que simulan de manera realista lo que le sucede a personas reales”, señala Hall. La pregunta que hicieron, según Hall, es “si forzáramos el modelo matemático para comer lo que come la gente real, con fluctuaciones cercanas a 30 por ciento, ¿cuál sería el cambio esperado en el peso corporal?”.
Tal vez te pueda interesar:Estos son los alimentos que debes dejar de comer si necesitas bajar de peso
“Lo que hallamos fue que las fluctuaciones diarias de unas 600 calorías condujeron únicamente a pequeñas variaciones en el peso corporal cercanas a 2 por ciento, alrededor de kilo y medio (tres libras) durante períodos de tiempo prolongados”, asegura Hall. Simularon diez años en el modelo. Sin embargo, advierte, estos resultados no constituyen una excusa para atracarse de comida con frecuencia. “Recuerde que el promedio a largo plazo de nuestra ingesta simulada de alimentos permaneció constante con el tiempo”.
Además, buena parte de las investigaciones anteriores han mostrado que incrementar el promedio de ingesta de alimentos con el tiempo sin lugar a dudas conduce al aumento de peso. La investigación actual sugiere que las personas que comen de manera sensata y en general mantienen su ingesta diaria en una cantidad razonable de calorías para conservar su peso, no necesitan estresarse por los atracones ocasionales porque compensarán posteriormente comiendo menos.
información: webmd.com
