Este es un plato que combina los sabores de las espinacas, el dulce de la miel, el sabor ácido de las fresas y la naranja de una manera magnífica. Es una receta llena de vitamina C y sana, apropiada para estos días de tanto calor y que mezcla sabores exquisitos, tanto pueden ser fresas como alguna otra fruta que apetezca: mango, trozos de manzana, pera, melón o melocotón. La ensalada de espinacas es su alternativa preferida frente a la tradicional de lechuga.
Por su parte las espinacas cumplen la función de fortalecer los músculos del cuerpo, especialmente los del corazón que bombean de forma continua la sangre a todas las partes del cuerpo, a su vez protege la membrana mucosa del estomago, así se disminuye la aparición de úlceras gástricas, también es rica en betacaroteno lo cual indica que excelente para aquellas personas que sufren de resequedad en los ojos, úlceras o deficiencia de vitamina A.
Ensalada de espinacas
Ingredientes:
- 300 g de Espinacas frescas
- 250 g de requesón.
- 20 fresas.
- 4 rodajas de piña natural.
- 4 kiwis.
- 40 g de semillas de lino doradas.
- 100 c.c. de aceite de oliva virgen extra 50 c.c. de vinagre de manzana.
- Una cucharada de miel de caña.
- Una cucharada de mermelada de cerezas.
Preparación:
- Lavamos, pelamos y cortamos la fruta en trozos pequeños (reservamos una fresa sin cortar).
- Rallamos el requesón.
- Ponemos en un plato llano grande una cama de espinacas frescas cortadas.
- Añadimos las frutas una por una, distribuyendo los colores.
- Agregamos el requesón
- En un bol mezclamos muy bien la mermelada, la miel de caña, el vinagre y el aceite y la echamos con la cuchara bien repartida por toda la ensalada.
- Terminamos decorando con semillas de lino doradas al gusto.