Actualmente cada vez son más las personas que están en la búsqueda de mantener el cuerpo en movimiento a través de diferentes rutinas de ejercicios. Ya que de esta manera logramos obtener buena salud al mismo tiempo que mejora la apariencia para sentirnos bien con nosotros mismos.
Pero el tiempo que se le dedica al descanso al igual que al número de repeticiones, es un factor fundamental dentro de una rutina de ejercicio exitosa. Pues el músculo necesita tiempo para lograr fortalecerse y crecer, de los contrario el exceso de actividad física puede provocar un sobreentrenamiento.
Esto reduce el rendimiento de nuestro cuerpo, eleva la presión arterial, disminuye la función del sistema inmunológico y puede llegar alterar la calidad del sueño. Por lo que no es raro que empiece a padecer de insomnio. Entonces cuando realizamos levantamiento de pesas o intervalos de carrera, el cuerpo experimenta daño en las fibras musculares. Es en los momentos de descanso en donde intenta reconstruirse para estar más fuerte y aumentar el tamaño de los músculos.
¿Cuánto tiempo debo descansar?
Recuerde que la fuerza y todas las ganancias musculares en realidad ocurren fuera del gimnasio o los tiempos destinados a realizar actividad física, de allí la importancia de tener periodos de descanso. Entonces después de un entrenamiento intensivo, el dolor, la disminución del rango de movimiento, de la fuerza muscular y la hinchazón son bastante comunes. Pues es cuando los músculos empieza a sanar.
De acuerdo con los especialistas, el dolor muscular alcanza el punto máximo llegadas las 24 o 72 horas después del entrenamiento intenso, a esta molestia se le conoce como dolor muscular de inicio tardío. Es por esta razón que se necesita de un mínimo de 24 horas de descanso después de cada entrenamiento duro. Inclusive podría extenderse de 2 a 3 días más, dependiendo del tipo y duración del entrenamiento.
Importancia de la recuperación activa
No es necesario que los músculos se tomen un descanso total para lograr recuperarse por completo, al terminar un entrenamiento exhaustivo. Ya que de acuerdo con varios expertos se puede realizar una recuperación activa, la cual consiste en mantener en movimiento el cuerpo, pero con un nivel de intensidad bajo.
Por ejemplo realizar algunas vueltas en natación, practicar yoga, caminar o trotar ligeramente, un tranquilo paseo en bicicleta, algunos masajes con rodillos de espuma e inclusive volar una cometa. Básicamente se trata de buscar alguna actividad que permita que la sangre fluya sin exigirle demasiado a los músculos.
Otras alternativas que se pueden incluir y que resultan efectivas son los estiramientos estáticos. Las terapias con agua en las que se alternan unos minutos bañándose con agua caliente y algunos segundos con agua fría o los famosos automasajes. También se hace importante dormir bien, pues es uno de los métodos fundamentales para que el cuerpo retome la energía necesaria para continuar con las actividades del día a día.
Recomendaciones
En realidad no existe una fórmula mágica que le indique cuáles son los días óptimos para que pueda descansar. Ya que todo depende del nivel de condición física, la intensidad, frecuencia y duración de los ejercicios que ha realizado. Además debe estar consciente de las señales que envía el cuerpo, como el dolor crónico en músculos o articulaciones y disminución de la energía.
De esta manera podrá saber el momento en el que su propio cuerpo le está pidiendo un descanso, por lo que no debe sentir temor a la hora de tomarse el día libre. Ya que esta elección no afectan en nada el progreso que ha tenido hasta el momento. Por el contrario es una herramienta necesaria para recargarse y empezar con toda la actitud.