A medida que pasa el tiempo, todo en nuestro cuerpo va cambiando. Los huesos se van debilitando y las mujeres son las más afectadas por su descalcificación, debido a los cambios hormonales. Ya que los estrógenos son reguladores del metabolismo óseo.
Por tal motivo es importante cuidar nuestra salud a tiempo. Adoptar estilos de vida saludable desde la juventud, para mejorar la calidad de vida en el presente y futuro. Como en la mayoría de los casos los ingredientes naturales son el complemento para prevenir y combatir la aparición de ciertas molestias, sin invertir mucho o ser agresivo con el organismo.
¿Qué es el diente de león?
Por si no lo sabías el diente de león (taraxacum officinale). También conocido como achicoria amarga, hace parte de la familia de las asteráceas y sus hojas son utilizadas por lo general en ensaladas. Además se le ha atribuido diferentes propiedades medicinales entre ellas la salud de los huesos.
En cuanto a sus características esta planta alcanza los 40 cm de altura y se encuentra fácilmente en pastizales, prados, caminos y jardines. Se dice que es depurativa, ya que ayuda a eliminar toxinas del organismo actuando en los riñones, hígado, vesícula biliar.
También disminuye la aparición de piedras en el riñón, mejora el estreñimiento y la resaca. Inclusive se le considera una buena opción para el eliminar impurezas de la piel, como tratamiento para acné al contener inulina, ácidos fenólicos y sales minerales.
Diente de león para los huesos
Al consumir esta planta se obtienen beneficios a largo plazo, porque permite que sus nutrientes ayudan a mantener los huesos fuertes y que se puedan recomponer ante el desgaste. Además reduce el dolor de huesos y articulaciones. Teniendo en cuenta que contiene vitamina A, C, K, E, ácido fólico, e inulina la cual es un tipo de fibra importante para la flora intestinal.
Entre sus minerales encontramos calcio, magnesio, potasio, hierro y silicio. Al igual que tiene elementos antiinflamatorios y antioxidantes como betacaroteno, polifenoles, ácidos chicórico, clorogénico, taraxínico, fitol, tetracosanol.
Ingredientes
- 1 taza de raíces picadas de diente de león ( también puedes comprar las bolsitas con la planta ya triturada)
- 1 taza de flores trituradas de diente de león
- 2 tazas de agua
- 1 cucharada de aceite de cocina
Preparación
- Picar las raíces y flores de la planta que deben estar secas, seguidamente agregarlas a un sartén con un poquito de aceite por unos minutos. Es recomendable hornearlas o tostarlas para tengan color y sabor.
- Calentar el agua y cuanto rompa a hervor incorporar las hojas y ramas de la planta por 5 minutos, retirar del fuego, colar y servir. Puede agregar un poco de miel para endulzar la bebida.
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Otros beneficios del diente de león
Aparte de beneficiar nuestro sistema óseo y de ayudar en el alivio de las dolencias ya mencionadas, esta planta es una aliada para combatir estas enfermedades:
- Regular el metabolismo: sus compuestos permiten regular los niveles de azúcar en la sangre, estimular la secreción de insulina, ayuda a controlar el colesterol y la absorción de grasas. Así como mejorar los síntomas a causa de una mala digestión.
- Disminuye la aparición de cáncer: Previene el crecimiento de células cancerígenas en los órganos como el hígado, colon, piel, páncreas. Aunque todavía hacen falta más investigaciones para asegurar su protagonismo en la prevencion del cancer.
- Previene contra las infecciones: según algunas investigaciones se relaciona su consumo con beneficios antimicrobianos y antibacteriales. Reduciendo los daños a causa de virus y bacterias.
- Regenera el hígado: Se dice que ayuda a regenerar el hígado, protegerlo contra toxinas y exceso de grasa.
- Mejora la piel: como ya habíamos dicho antes, sus compuestos protegen la piel contra los daños solares, el acné. Reduce la inflamacion e irritacion
