El envejecimiento es un proceso natural de la vida por el que todos en algún momento tendrán que pasar, es allí donde empiezan aparecer las canas, arrugas y zonas flácidas en el cuerpo, entre otras cosas. Sin embargo, se puede mejorar esa relación con el espejo al tener un estilo de vida más saludable. Ya que de acuerdo con varios estudios, aquellas personas que son físicamente activas pueden llegar a ralentizar el proceso de envejecimiento. Bailar es una de esas formas de actividad física que resultan bastante efectivas, tanto en el cuerpo como para la salud mental, por lo que valdría la pena dedicar un poco más de tiempo a disfrutar de los diferentes ritmos.
Si no tienes la oportunidad de asistir a clases de baile, solo intenta levantarte del asiento y moverte a tu propio ritmo, de esta manera lograrás alejarte de un estilo de vida bastante sedentario y mejorar tu estado de ánimo. Para muchas personas es más sencillo y motivador bailar que realizar otro tipo de ejercicios más tradicionales. Lo mejor de todo es que no requiere adquirir equipos de entrenamiento especiales, más allá de tu propio cuerpo, ropa cómoda, espacio suficiente y las melodías, por lo que se puede practicar en cualquier momento y lugar.
¿Por qué bailar es beneficioso para tu salud?
La Dra. Kathirn Rehfeld quien es autora principal del estudio, con sede en el centro alemán de enfermedades neurodegenerativas, Magdeburgo, Alemania. Afirma que el ejercicio tiene un efecto positivo en las personas. Esto a la hora de ralentizar o incluso contrarrestar la disminución de la capacidad física y mental relacionada con la edad. En dicha investigación se seleccionaron a 52 voluntarios con edades entre los 63 y 80 años.
Se dividieron 2 grupos, a uno se le asignó unirse a clases de baile, mientras que el otro formó un grupo de control deportivo. Las personas que asistieron al baile, lo hicieron con cambios constantes en la coreografía, por lo que debían memorizar cada uno de los nuevos movimientos. Por otro lado, el programa para el grupo deportivo consistía en realizar entrenamiento de fuerza, resistencia y flexibilidad, ambos durante 18 meses.
Resultados del estudio
Se evidenció que en los dos grupos hubo un aumento en la región del hipocampo del cerebro, lo que es muy importante, ya que esta área es más propensa al deterioro con el paso de los años. También se ve afectada por enfermedades como el Alzheimer. Además, tiene un papel fundamental en la memoria, el aprendizaje y en mantener el equilibrio. Pero fue el baile quien tubo los cambios de comportamiento más notables.
Esto se debe a que el grupo de danza se enfrentaba a algo nuevo cada semana, en lugar de practicar actividades físicas repetitivas como caminar o andar en bicicleta. Se realizaron varios cambios de géneros musicales, de las formaciones y la velocidad. Cada dos semanas se incluyeron nuevos pasos, así como movimientos de brazos, todo esto con el objetivo de mantener un proceso de aprendizaje constante. Sin duda el aspecto más desafiante para cada participante era recordar las rutinas bajo el límite de tiempo y sin ninguna señal de instructor.
Para tener en cuenta
En general, todas aquellas personas que practican actividad física de forma rutinaria pueden mejorar sus condiciones de salud, pero es el baile el que tienen el efecto más profundo. Es una herramienta poderosa a la hora de mantener una vida independiente y saludable por el mayor tiempo posible. Permite establecer nuevos desafíos que pueden llegar a reducir varios factores de riesgo y deterioro relacionados con la edad.
Sin embargo, recuerda que no solo es importante ejercitar tu cuerpo en edades avanzadas, debería ser un hábito muy presente en la vida de cualquier persona, incluso desde edades tempranas. Esto seguido de una alimentación con productos de calidad nutricional para obtener grandes beneficios a corto y largo plazo.