El jengibre se usa como especia en la cocina, pero se ha demostrado que también tiene efectos positivos en la salud, incluso el aceite de jengibre puede traer algunos beneficios de los que te hablaremos en esta oportunidad. También te indicaremos la manera de usarlo para que sea seguro, así que sigue leyendo para más información.
Este es un aceite que se extrae del rizoma del jengibre luego de un proceso de destilación. Su aroma se describe como algo fuerte o picante, que se usa en la aromaterapia, la piel, el cabello y para aliviar otras afecciones. Sin embargo, la mayoría de sus beneficios necesitan de más investigación para realmente confirmar su efectividad.
Propiedades del aceite de jengibre
Se cree que tiene potentes efectos antioxidantes y antiinflamatorios, al igual que propiedades antimicrobianas para combatir diferentes hongos y bacterias. Al parecer también tiene un efecto broncodilatador y analgésico. Esto probablemente se encuentre relacionado con sus propiedades antiinflamatorias, gracias a los compuestos fenólicos y las grasas de buena calidad que posee este producto. Además, es fácil de encontrar en el mercado.
Beneficios del aceite de jengibre
Entre sus posibles ventajas se destaca el tratamiento del dolor, como en las enfermedades musculoesqueléticas o articulares. De igual manera puede ayudar a prevenir enfermedades metabólicas, esto se debe a su capacidad antioxidante y antiinflamatoria. Por ejemplo, minimizar el riesgo de resistencia a la insulina, la aterosclerosis o problemas cardiovasculares. Aunque debes tener en cuenta que su consumo no se aconseja en gran cantidad.
El aceite de jengibre también podría reducir las náuseas y vómitos, así como ayudar a combatir los radicales libres y con ello evitar el daño en el ADN, previniendo diferentes patologías. Entre las que tenemos el cáncer.
¿Cómo usar el aceite de jengibre?
A continuación, te enseñamos algunas de las formas en las que puedes usar aceite de jengibre para aprovechar todos los posibles beneficios que le brinda a tu cuerpo. Desde su aplicación e inhalación, hasta su consumo.
Para aplicaciones tópicas
- Cuando se desea aplicar en la piel, siempre debe diluirse con un aceite portador como el de almendras, jojoba, coco o aguacate. Además, lo que se recomienda es que la solución no pase de 3 a 5 por ciento.
- Para la solución al 3 por ciento necesitas usar 20 gotas de aceite esencial por onza de aceite portador.
Para la aromaterapia
- La primera opción es con un difusor, pero en algunos casos es necesario diluir el aceite en agua, así que lo mejor es asegurarse de leer bien las instrucciones que viene con el difusor.
- También puedes refrescar el aire de la habitación al hacer un spray, usa de 10 a 15 gotas por onza de agua y si lo deseas, agrega un agente dispersante como solubol, esto ayudará a distribuir el aceite en el agua.
- Para las inhalaciones de vapor tienes que calentar el agua hasta que esté humeante, luego colócala en un recipiente y agrega unas gotas de aceite de jengibre, puedes comenzar con una o dos gotas.
- Ahora coloca una toalla sobre la cabeza, cierra los ojos y acércate al recipiente para inhalar su aroma.
Para el consumo
- La recomendación es que no se consuma ningún tipo de aceite esencial y en el caso del jengibre lo mejor es que se aproveche la raíz como lo que es, una especia. Sin embargo, el aceite se puede en utilizar en muy pequeñas cantidades, lo que también servirá para saborizar los platos y enriquecerlos con sus propiedades.
- Mézclalo con aceite de oliva u otro aceite para condimentar las ensaladas.
Para tener en cuenta
- Recuerda que el consumo de jengibre se encuentra contraindicado para algunas personas y debes tener cuidado. Las mujeres en embarazo o en etapa de lactancia deben consultar primero con un médico.
- De igual manera quienes toman anticoagulantes, los que sufren de diabetes e hipertensión.
- El hecho de que se trate de algo natural, no quiere decir que no tengas las precauciones necesarias.