La manzanilla o camomila común es una hierba que pertenece a la familia de las asteráceas. El té que se elabora a partir de las flores y agua caliente ha sido utilizado para combatir diferentes molestias en el cuerpo. También es una alternativa sin cafeína para el té negro o verde, se caracteriza por un sabor terroso y un poco dulce. Mientras que su contenido en antioxidantes logra desempeñar un papel importante a la hora de reducir el riesgo de varias enfermedades, como lo es el cáncer y las afecciones cardíacas.
En cuanto a la pérdida de peso, también puede puede ser provechoso al usarse solo como un complemento natural a los hábitos ya establecidos, como la dieta y el ejercicio. Aunque no se trata de un producto quemagrasa, puede mejorar varios aspectos que sí influyen en el proceso de adelgazamiento. Por ejemplo, es una bebida baja en calorías que te mantendrá hidratado, ayuda a reducir los niveles de estrés que afectan tu salud en general. Así como también promueve el sueño durante las noches.
Manzanilla y la pérdida de peso
El reducir tus niveles de estrés a través de una rutina de relajación en la que incluya un té de manzanilla, puede tener efectos positivos sobre tu cuerpo. Ya que el estar continuamente bajo situaciones estresantes eleva los niveles de la hormona cortisol, logrando que aumente el apetito. Sobre todo, los antojos por alimentos grasos y azucarados.
De igual manera es una excelente opción para sustituir diferentes bebidas azucaradas que se encuentran el mercado, que aportan bastantes calorías pero pocos nutrientes. Puedes beber té de manzanilla frío o caliente, solo asegurate de no agregar edulcorantes para que se mantenga natural.
Su consumo también promueve la salud digestiva, ya que relaja los músculos gastrointestinales, alivia los gases y el malestar estomacal. Una propiedad adicional de este remedio casero es que es diurético, por lo que permite eliminar el exceso de líquidos y con ello la inflamación abdominal para obtener un vientre más plano.
Cómo preparar té de manzanilla
Preparar esta bebida es muy sencillo, solo necesitas de 15 minutos y 2 ingredientes, pero si puedes adquirir las bolsas ya listas, solo es necesario remojarlas. Consume en las mañanas en ayunas y en las noches antes de irte a dormir. Otra forma de aprovechar sus propiedades es al consumirse 10 minutos antes del almuerzo y la cena. Esto ayudaría a estimular la digestión, sin embargo, no debes tomar más de 4 tazas al día.
Ingredientes
- 1 litro de agua
- Un puñado de flores de manzanilla
Preparación
- Empieza por verter el agua en una olla, luego debes llevar al fuego hasta que llegue a punto de ebullición. Agrega la manzanilla y deja reposar por 10 minutos. Por último, cuela, sirve y disfruta.
- El té de manzanilla también favorece la hidratación, lo que es muy importante, pues en ocasiones las personas suelen confundir el hambre con la sed. Cuando tu cuerpo necesita algo, que puede ser comida o líquidos, le avisa con síntomas que a veces pueden ser confusos.