La bulimia es un trastorno alimentario que pone en peligro la vida. Se caracteriza por los atracones seguidos de purgas, que pueden ser la inducción al vómito, tomar laxantes o diuréticos, así como el ejercicio excesivo. Las personas que padecen bulimia tienen una imagen de su cuerpo poco realista, están obsesionadas con el peso y son bastante autocríticas. Este problema es más común en las mujeres, sobre todo en la etapa de adolescencia o iniciando la adultez, lo que requiere de un tratamiento profesional que también abarca el tema de salud mental.
Entre los síntomas comunes se encuentra el miedo de aumentar de peso y comentarios al respecto, autoimagen negativa, atracones, ir al baño inmediatamente después de ingerir alimentos. Dientes manchados, ausencia del periodo menstrual, abusar de los ejercicios, drogas o alcohol, uso de hierbas o suplementos para bajar de peso. No comer delante de los demás y alejarse de las actividades sociales, entre otros comportamientos alarmantes.
Efectos de la bulimia en tu cuerpo
La bulimia no cuenta con una causa específica conocida, pero existen factores que influyen en su desarrollo. Por ejemplo, tienen un mayor riesgo las personas que sienten una fuerte necesidad de cumplir con las expectativas de la sociedad o aquellos que se encuentran influenciados por los medios de comunicación. También si sufres de problemas psicológicos y emocionales, incluso varios estudios sugieren que podría ser genética o hereditaria. Todo esto en realidad trae bastantes complicaciones en la salud y es de lo que te hablaremos en esta ocasión.
1-Puede afectar el sistema digestivo
Este ciclo de atracones y después deshacerse de lo consumido hace que te sientas muy débil, que tengas dolor en la garganta o en el estómago como primeros efectos. A medida que el trastorno avanza, los dientes también empezaran a sufrir, ya que ocasiona la erosión del esmalte, sensibilidad dental y graves problemas con las encías.
Es probable que se tengan mejillas hinchadas a causa de la inflamación en las glándulas salivales, que tengas acidez y reflujo ácido. El uso descontrolado de diuréticos, laxantes y pastillas para adelgazar podría dañar los riñones. También puede aparecer la hinchazón, diarrea y estreñimiento, incluso se puede sufrir de hemorroides.
2-Provoca un desequilibrio hormonal
Experimentar estas deficiencias nutricionales puede acabar con el deseo sexual, interferir con tu ciclo menstrual o detenerlo por completo y si ya no se liberan óvulos no es posible el embarazo. En el caso de las mujeres que se encuentran ya embarazadas y que siguen con estos episodios de comer en exceso y luego eliminar lo consumido de cualquier forma, solo ocasiona más problemas para la salud de la mujer y de ese bebé que viene en camino.
Tendrás presión arterial alta, diabetes gestacional, parto prematuro o aborto espontáneo. Existe una mayor probabilidad de parto por cesárea, de bebés con bajo peso al nacer, defectos del nacimiento o que el niño nazca muerto. También es bastante común pasar por las dificultades para amamantar y la depresión postparto.
3-Afecta la apariencia de piel, uñas y cabello
En realidad la bulimia causa estragos en cada sistema de tu cuerpo, por lo que tu cabello, piel y uñas no son la excepción. Los mechones se vuelven secos y encrespados, así como puedes empezar a experimentar su caída. Otro de los efectos secundarios es que sentirás la piel seca o escamosa, mientras que las uñas están quebradizas.
4-Afecta al sistema circulatorio
El vómito o la evacuación frecuente causa deshidratación, lo que conduce a músculos débiles y mucha fatiga, los electrolitos que tienden a desaparecer son el potasio, el magnesio y sodio. También pueden existir problemas relacionados con el corazón. Por ejemplo, latidos irregulares y un músculo cardíaco debilitado. Por otro lado, la fuerza que se hace al vomitar puede lograr que los vasos sanguíneos de los ojos se rompan.
5-Existe una imagen corporal distorsionada
La imagen que se tienen sobre el cuerpo se encuentra muy alejada de lo que es la realidad, aunque su delgadez pueda ser evidente ante los demás, esas personas se siguen viendo con sobrepeso cada vez que paran frente a un espejo. Este es uno de los aspectos que más requiere atención cuando se inicia tratamiento, es indispensable empezar a trabajar en mejorar esa percepción que se tiene de sí mismo y que es lo que afecta parte de su vida.
6-Puede experimentar depresión
Cuando se tiene bulimia puedes experimentar ansiedad, depresión o comportamientos obsesivo-compulsivos. El mal humor y la irritabilidad se debe a la falta de vitaminas, así como a ese control frecuente de la alimentación y el peso que se vuelve en una obsesión. Tras el deseo de alcanzar el peso ideal muchas personas se involucran en el consumo de sustancias y todo este tema de guardar secretos contribuye a la culpa, el estrés o la ansiedad.
7-Aislamiento social
Es común que el paciente con este tipo de trastorno prefiera estar solo con el objetivo de evitar el problema, de no escuchar las opiniones que tienen las demás personas a su alrededor o quizás no quiera que se enteren de todos los comportamientos por los que está pasando. Esto solo empeora la situación, tanto a nivel emocional como a seguir con las purgas después de comer. La psicoterapia en estos casos es una parte muy importante.
8-Puede poner en riesgo la vida
Por un lado, la depresión puede conducir a pensamientos suicidas, mientras que todas esas alteraciones en cada uno de los sistemas de tu cuerpo hace que estés expuesto a una infinidad de enfermedades que con facilidad se pueden agravar. Aunque controlar la bulimia tiende a ser un desafío para toda la vida, en realidad si se puede superar con el tratamiento adecuado y entre más temprano se detecte dicho problema, mayor será el éxito.
Por lo general, el tratamiento requiere de medicina, terapia y educación nutricional. En especial la colaboración entre médicos, familiares y amigos. Algunos programas ofrecen tratamiento diurno y otros interno, en donde se recibe atención y apoyo las 24 horas del día. Esto depende de cada paciente y la gravedad de la situación.