Realizar ejercicio al aire libre tiene múltiples beneficios que van más allá de los que puede aportar la sala de acondicionamiento muscular o las clases dirigidas en centros de Fitness. Y es que la investigación ha demostrado mayores beneficios sobre el bienestar, autoestima y motivación. Entrenar aproximadamente 30 minutos al día al aire libre, con la ayuda del sol y el contacto con la naturaleza, va a aumentar tus niveles de energía, te revitalizará y reducirá tus niveles de ansiedad y mal humor en tu día a día. Veamos a continuación una serie de beneficios que son clave en el entrenamiento al aire libre.
Estos son los mejores beneficios:
1. Entrenaràs más tiempo
¡El tiempo vuela cuando no estás en el gimnasio! “Cambiar la rutina, ver caras nuevas y disfrutar de las panorámicas te ayudará a combatir el típico aburrimiento del entrenamiento,” dice Robert Gotlin, DO, director de la Ortopedia y rehabilitación deportiva del Centro Médico Beth Israel en la ciudad de Nueva York. Por si fuera poco, te distraerás y no notarás lo extenuante que puede llegar a ser el ejercicio que estás realizando.”Cuando uno está distraído por aquello que le rodea, es menos consciente del esfuerzo que realiza, puede que ni siquiera notes hasta qué punto estás agotada.” Incluso puedes llegar a duplicar tu entrenamiento de 60 minutos sin darte cuenta.
2.Entrenar a la luz del sol
La vitamina D que sintetizamos a partir de la exposición del sol en nuestros entrenamientos al aire libre tiene grandes beneficios sobre la salud de los huesos, músculos y la función del metabolismo, así como en la prevención de enfermedades cardiovasculares (Pludowsky et al., 2013). Además, se trata de un tratamiento frecuente para la depresión y otros problemas del estado anímico. En primavera y verano, sólo sería necesario exponerse unos 10 minutos al día al sol para cumplir los requerimientos mínimos de vitamina D (Serrano et al., 2017). Asimismo, la exposición durante el día puede ayudar a dormir mejor por las noches, mejorar la función inmunológica e incrementar la producción de las “hormonas de la felicidad”. Sin embargo, debemos tener ciertas precauciones cuando el ejercicio se realiza en ciertas épocas de mucho calor como el verano, ya que puede tener un efecto contrario y perjudicial para nuestra salud
3 Mantendrà tu motivación alta
entrenar al aire libre eleva la felicidad hasta en un 50%, algo fundamental puesto que es una actividad recreativa en la mayoría de los casos. Observar lugares nuevos mientras corremos o probar nuevas superficies para fortalecer nuestros músculos funcionalmente es una estupenda opción que respetará uno de los principios del entrenamiento: la variabilidad. Se reducirá la tensión acumulada durante el día al pasar por lugares naturales, como pudiera ser un parque.
4 Menor sensación de ansiedad
Ir al gimnasio por primera vez, especialmente a ciertas horas concretas del día, podría agobiar. Entrar en un entorno nuevo, cerrado y abarrotado de gente moviendo hierros y usando material que nunca has visto antes y realizando ejercicios que para ti son una novedad y que no sabes cómo se realizan, es posible que no sea la mejor manera de comenzar un programa de ejercicio si lo que se busca es la motivación y continuar con ello a lo largo del tiempo. El entrenamiento al aire libre consigue eliminar instantáneamente la mayoría de este tipo de ansiedad haciendo el ejercicio en lugares de gran espacio, con menos gente, con ejercicios que resultan fáciles de ejecutar y posiblemente en un entorno que ya conoces, agradable y que puede transmitir más tranquilidad y seguridad.
5 favorece la concentración.
Es probable que afirmes lo contrario, argumentando que ante más estímulos visuales menor debe ser la concentración. No es del todo cierto. Un estudio publicado en la Universidad de Illinois mostró que si los niños anduvieran 20 minutos al día por un parque estarían mejorando su capacidad de atención y concentración respecto al típico lugar cerrado. Una conclusión aplicable perfectamente a adultos.
6 Beneficios psicológicos
Cuando se está en el gimnasio, puede que a veces sientas muchas miradas pendientes de ti. Cuando haces ejercicio al aire libre, esa atención se disipa y todo el mundo está más pendiente de su entrenamiento que de otras cuestiones. Hacer ejercicio es beneficioso para tu autoconfianza, pero el ejercicio al aire libre puede ser incluso mejor. Entrenar al aire libre puede aumentar tu vitalidad, mejorar el bienestar y autoestima (Thompson et al., 2011) así como reducir la ansiedad (Mackay & Neill, 2010). Además, no es necesario realizar los entrenamientos a intensidades muy altas o máximas, ya que los mayores efectos positivos se encuentran con el ejercicio a intensidad moderada (Gladwell et al., 2013).
7 Peso ideal
Si lo que buscas es perder peso qué mejor sitio que al aire libre. Múltiples espacios te proporcionarán los lugares necesarios para desarrollar tanto el programa cardiovascular como los días de tonificación. El agradable ambiente de una zona verde prolongará tu sesión de entrenamiento respecto al horario cerrado que tenías en un gimnasio. Aunque parezca que no, se nota.
8 Mayor adherencia
Crear un hábito de entrenamiento es difícil, pero si se encuentra un deporte que guste puede ser determinante para que se tengan ganas siempre de volver. El disfrute que se puede llegar a sentir con los entrenamientos al aire libre puede conseguir que aumente la adherencia del participante al ejercicio físico. Varios estudios demuestran que se suele hacer ejercicio al aire libre durante más tiempo o en mayor cantidad que entre cuatro paredes (Lacharité-Lemieux et al., 2014; Kerr et al., 2012).
9 Ahorrarás dinero
¿Cuántas veces te habrás enfadado contigo misma al ver que gastas dinero en matrículas y cuotas de gimnasio que no aprovechas? ¿O has tenido la sensación de estar desperdiciando el dinero invertiendo en un gimnasio casero que tampoco usas lo suficiente? Si practicas deporte fuera de casa, reducirás gastos fijos mensuales, y si tienes máquinas en casa, reducirás facturas.
10 Serás más feliz
Pasearte al aire libre es como ir de excursión. “Respirar aire fresco en vez de aire reciclado puede crear una sensación de euforia, que proviene de la liberación del cuerpo de endorfinas”, dice Gotlin. “No es que tus músculos respondan mejor al ejercicio al aire libre. Es la mente que se siente mejor y hace que trabajar más duro.” El ejercicio en el exterior también crea una mayor sensación de revitalización, energía y pensamiento positivo, según un informe publicado en Environmental Science and Technology. Es más, después de un paseo de 30 minutos en el parque, el 71% de las personas se sienten menos estresadas, mientras que el 72% de los que realizan paseos en espacios cerrados sienten estar más estresadas.