Dar a luz es una gran hazaña de la que deben sentirse orgullosas todas la mujeres, pues tienen que pasar duras horas e incluso días de trabajo de parto, sumado a la recuperación y el nuevo rol que debe desempeñar las 24 horas del día. Esto se vuelve una rutina agotadora en donde el descanso se vuelve una necesidad.
Pero para muchas mujeres mantenerse activas también es algo importante en su vida. Por lo que desean volver a sentirse como antes y es una de las preguntas que más abundan después de tener a su bebé, ¿Cuando podré realizar actividad física de nuevo?. Cuya respuesta varía según el método del parto, si vía vaginal o cesárea, cuáles fueron las condiciones físicas antes y durante el embarazo.
En primer lugar debe escuchar a su cuerpo, para saber la línea de tiempo individual. Ya que es usted quien puede saber si determinado movimiento es demasiado para su cuerpo o si es muy pronto para iniciar con actividad física. Cuando se sienta listo puede guiarse por los consejos que veremos a continuación, sin embargo cualquier duda e inquietud sobre los ejercicios debe comunicarlo con el médico.
Respiración diafragmática
Los ejercicios que se hacen en un entrenamiento básico, no se deben realizar durante el periodo postparto, debido a que aumentan la presión intraabdominal. Por lo que otro trabajo central puede ayudarle a la rehabilitación, como lo es la respiración diafragmática. Ya que tiene la capacidad de llevar esa conexión entre el núcleo y el piso pélvico.
Este tipo de respiración es el primer paso que las mujeres deben realizar antes de volver al ejercicio, pues hace que los músculos del núcleo interno trabajen juntos y puede realizarse acostados o sentados. Solo debe profundizar la respiración, dibujándola en la parte baja de la espalda, por lo que debería sentir que su caja torácica se expande 360 grados, luego exhalar y dejar que todo se contraiga nuevamente.
Trabajar los músculos del suelo pélvico
Los músculos del piso pélvico pueden llegar a estirarse o lesionarse durante el proceso de parto y para conectarlos se debe realizar ejercicios básicos de kegel, en donde intente sostener los músculos de 3 a 8 segundos. A medida que avance puede intentar realizar ejercicios restauradores suaves, como marchas en el talón, activación del núcleo acostado de lado, y puentes de glúteos.
Otro ejercicio que puede realizar es al exhalar una respiración diafragmática, intentar aplicar resistencia, como si estuviera inflando un globo o apagando velas. Al mismo tiempo, dibujar su piso pélvico como si estuviera cerrando la pelvis alrededor de una canica y levantarlo hacia arriba como si recogiera la canica del piso.
Realizar movimientos funcionales
Trate de realizar la respiración diafragmática en actividades básicas como levantarse de la cama, levantar al bebé. Ya que al concientizar el núcleo y el piso pélvico mediante la respiración en la rutina diaria, logrará un mejor soporte en la pelvis y columna vertebral. A medida que va sanando su cuerpo para volver a la vida normal, sin ningún contratiempo.
La postura también juega un papel importante en el proceso de curación, sobre todo si está amamantando. Además durante la etapa de lactancia los niveles de la hormona relaxina que afloja las articulaciones, los ligamentos y el tejido conectivo para el parto, todavía están elevados. Esto puede provocar que piense que tienes más curvas y a la hora de hacer ejercicio aumentar el riesgo de lesiones y retrasar la curación.
Cambiar la perspectiva sobre el ejercicio
Aunque no lo parezca, los ejercicios descritos pueden beneficiar en gran medida la recuperación del cuerpo. Para que este se encuentre en las mejores condiciones y así pueda afrontar los nuevos obstáculos a la hora de iniciar actividad física. Como lo es el cuidado infantil, los cambios en el cuerpo, la falta de sueño, el cansancio.
Sin dejar aún lado la posibilidad de sentirse frustrado a la hora de realizar ejercicios después del parto, ya que el rendimiento no será igual. Entonces debe de tratar de cambiar el pensamiento y disfrutar del bebé, más que de iniciar pronto con un entrenamiento. Dedique tiempo para descansar y sanar el cuerpo, para sentirse más fuerte a la hora de regresar al gimnasio.