Para aquellos con ansiedad, puede ser difícil sentirse normal cuando sale de la nada. Cuando un momento está bien y el siguiente es una batalla mental difícil, es útil saber cómo sobrellevarlo cuando los factores desencadenantes aparecen tan repentinamente. Susi Sena en YourTango explica qué pasos dar cuando parece imposible entender los factores desencadenantes.
La ansiedad puede surgir de la nada: Es posible que se haya preguntado: “¿Por qué tengo ansiedad y qué la causa?”
Sentirse ansioso es normal en situaciones desafiantes. Ya sea en el trabajo, en casa o conduciendo en el tráfico, la vida te presenta pruebas diarias. La ansiedad no tiene respeto por la geografía; puede encontrarte en cualquier lado.
Lo más probable es que se haya enfrentado a la ansiedad antes, pero puede que no haya sido demasiado difícil superarla. Un día estresante en el trabajo es un ejemplo de una situación desafiante. Puede hacer que su mente se ponga nerviosa, aumente la presión arterial y gire el estómago. Cuando termina el día, los síntomas pasan.
¿Qué sucede, sin embargo, cuando la ansiedad te golpea sin razón aparente?
No hubo desencadenantes obvios como el estrés laboral o las presiones domésticas. Este sentimiento se apoderó de ti de la nada y hay algunos indicadores amortiguados que pueden volar bajo el radar.
Aquí hay tres posibles razones por las que la ansiedad asoma su horrible cabeza, incluso cuando la vida es buena y te sientes genial:
1. Tu rutina de autocuidado es la culpable.
A menudo, los momentos y días después de experimentar ansiedad cambian la vida. Probablemente haya experimentado este fenómeno después de un momento estresante en su vida.
Si quema la vela en ambos extremos, no hace suficiente ejercicio y no come bien, puede aparecer ansiedad. Muchas personas mejoran su rutina de autocuidado para mejor. Hacer un cambio en una dieta más saludable y hacer más ejercicio puede ayudar a mantener la ansiedad a raya. Monitorear las situaciones estresantes en su vida también ayuda.
Una deficiencia de B12 y magnesio puede contribuir a un aumento de la ansiedad. Los azúcares que se degradan rápidamente en el cuerpo también dan la bienvenida a la ansiedad. La deshidratación también puede hacer que los síntomas empeoren.
Tome nota de lo que está poniendo en su cuerpo y cambie su dieta en consecuencia. La actividad física puede evitar los síntomas de ansiedad durante horas. Además, los efectos de una rutina de ejercicios pueden ser duraderos.
Estos son cambios positivos que ejemplifican una excelente autoconciencia. A medida que la vida continúa, su hipervigilancia puede volverse más relajada. La mayoría de las veces esto no representa un problema. Sin embargo, hay momentos en que la ansiedad aprovecha esta oportunidad para colarse en su mente y cuerpo sin previo aviso.
La ansiedad de lucha comienza mucho antes de que se puedan sentir los síntomas. Tomar medidas preventivas, en términos de autocuidado, es como estar un paso por delante de esta angustia.
2. Usted tiene un disparador desconocido.
Ahora te has dado cuenta de lo que desencadena la ansiedad en tu propia vida. Los desencadenantes pueden abarcar toda la gama desde conocer nuevas personas hasta conducir en la autopista. Cada persona es diferente Por lo tanto, cada persona tiene un conjunto único de reacciones mentales a las situaciones.
A medida que la vida cambia, también cambias. Lo que fue un disparador ayer, puede que no sea uno hoy. Los desencadenantes pueden cambiar en cuestión de días, semanas o meses. No hay escasez de factores estresantes en este mundo acelerado y se generan nuevos factores desencadenantes todos los días.
La forma de combatir un desencadenante inesperado es practicar la atención plena o la autoconciencia. Cuanto mejor te conoces, menos sorpresas mentales experimentarás.
3. Sus niveles de estrés han aumentado.
Al igual que una rana en agua cada vez más caliente, el estrés tiene una forma de regresar a tu vida. A medida que pasa el tiempo, te acostumbras a tu nivel de estrés . Poco a poco, más encuentra su camino en su vida.
Es un efecto ladrillo por ladrillo. En el momento en que te das cuenta de lo que sucedió, la ansiedad silenciosamente construyó un muro entre tú y la tranquilidad.
Una vez más, la atención plena y la autoconciencia pueden ayudar a prevenir esta situación. Controle mentalmente el nivel de estrés en su vida.
La lucha contra la ansiedad puede parecer una subida cuesta arriba, especialmente cuando se visita inesperadamente. Un profesional puede ayudarlo a diseñar un plan para mantenerse un paso por delante de la ansiedad.