Cuando se trata de perder peso, no solo la dieta y el ejercicio juega un papel importante, los hábitos saludables en general son la fórmula para alcanzar los objetivos propuestos. Por ello, la cantidad de sueño durante las noches también ha ganado protagonismo. En esta oportunidad hablaremos de las razones por las que deberías dormir lo suficiente y no menos de 6 horas. Aunque los requisitos de sueño varían en cada persona, lo recomendable para los adultos está entre 7 a 9 horas sin interrupciones.
La falta de sueño altera de forma drástica como tu cuerpo responde a la comida. Ya que el apetito aumenta, es más difícil resistirse a las tentaciones y saber controlar las porciones. Incluso puede volverse un círculo vicioso, entre menos duerma, más peso puede ganar y este sobrepeso puede que también interfiera en la capacidad para dormir. De allí la importancia de prestar más atención a esta situación.
¿Cómo se relaciona el sueño con la pérdida de peso?
Diferentes estudios han podido demostrar que las personas que no duermen bien tienen mayor apetito. Es probable que esto se deba al impacto que ejerce sobre las hormonas del hambre, que son la grelina y la leptina. La primera es una hormona producida en el estómago y viaja a través del torrente sanguíneo hasta el cerebro, para indicarle que tenga hambre y busque el alimento. Mientras que la segunda es liberada por las células grasas, lo que hace es suprimir el apetito e indicar saciedad. Pero cuando no duermes lo suficiente, tu cuerpo produce más grelina que leptina.
La ausencia de un descanso apropiado también altera la forma en la que funciona tu cerebro, lo que dificulta la toma de decisiones y la capacidad para resistirse ante las tentaciones. Esto se relaciona con la actividad del lóbulo frontal que es el encargado de las decisiones y el autocontrol. De igual manera, parece que los centros de recompensa se estimulan más con la comida cuando no duermes. Siendo probable que después de una mala noche, los alimentos ricos en calorías sean bastante deseados.
Otras razones en las que el sueño influye en la pérdida de peso
Pocas horas de descanso se traduce a un mayor tiempo en el que se encuentra despierto y disponible para consumir más alimentos. Por ejemplo, cuando pasa varias hojas frente a televisor, hasta el punto de llegar a la madrugada. La mayor parte del exceso de calorías se obtienen en los bocadillos consumidos después de la cena, esta falta de sueño también puede afectar la capacidad a la hora de controlar el tamaño de las porciones.
Dormir bien te permitirá estar más activo al día siguiente, de tal forma que puedan cumplir con todas las actividades planeadas. Entre las que se incluye la práctica de actividad física. De lo contrario estarás más fatigado, te sentirás menos motivado y no podrás culminar con la rutina, lo que dificulta el proceso en la pérdida de peso.
La falta de sueño también puede hacer que las células se vuelvan más resistentes a la insulina. Esta esa una hormona que mueve el azúcar del torrente sanguíneo a las células para que sea usada como energía. Pero cuando las células se vuelven resistentes, el cuerpo trata de producir más insulina para compensar. Dando como resultado más hambre y ordenandole al cuerpo que almacene más calorías en forma de grasa.
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Publicado por Adelgazar en casa en Viernes, 16 de octubre de 2020
