Para disfrutar de un delicioso postre, ya sea en familia a la hora de calmar el antojo o para algún evento, no necesariamente se debe agregar cantidades elevadas de azúcar. Pues existen sustitutos que son más saludables y no cambian por completo el sabor, como el edulcorante sucralosa que se utiliza en esta receta.
Ya que en esta ocasión veremos como se puede preparar un rico cheesecake, pero en lugar de un base con galletas y mantequilla, se incluye avena arrollada, harina de algarroba y aceite de girasol, que se caracterizan por contener varios nutrientes beneficiosos para nuestro organismo. Siguiendo con la secuencia saludable, para el relleno se empleó queso y yogurt descremado con el toque extra de sabor y color en las frutas.
Propiedades de los ingredientes
Antes de empezar con la receta, es importante aclarar la información sobre algunos ingredientes que quizás sean desconocidos para muchos. Por ejemplo:
La avena arrollada: Es el tipo de avena más tradicional, se obtienen al sacar la cascarilla y moler los granos de avena. Se recomienda cocinarla ya que su estado es totalmente crudo, pero algunas recetas se usa así. Contiene fibra lo que ayuda reducir el colesterol, mejorar el tránsito intestinal, aportar energía y estimular la saciedad.
Harina de algarroba: Es un producto que se obtiene a través de una legumbre y es el sustituto a diferentes recetas de bizcochos, galletas o tartas. Es baja en grasas, contiene fibra, vitaminas del grupo B, hierro y potasio, todo esto permite ayudar con el control del peso, mejorar la función intestinal y los niveles de colesterol en sangre.
La algarroba es el fruto del algarrobo, por lo que se presenta en forma de vaina con semillas en su interior y con un sabor dulzón. Pero para obtener esta harina se necesita retirar las semillas, deshidratarlas, tostarlas y por último moler hasta encontrar un polvo fino. Ya en esta presentación, se elaboran diferentes recetas incluida la que veremos a continuación.
Receta del cheesecake
Esta es una excelente opción para disfrutar de un delicioso postre al mismo tiempo que cuidamos la figura y la salud. No se necesita de un horno como en la mayoría de tortas, la preparación es sencilla, rinde para 2 porciones y el tiempo de espera no es tan largo. En esta versión se agregó una cobertura de maracuyá para darle ese toque de frescura, pero puede variar la fruta con aquella que más sea de su agrado.
Ingredientes para dos porciones
Para la base
- 1 taza de avena arrollada organica
- 2 cucharadas soperas de harina de algarroba
- 1 sobre de edulcorante sucralosa
- 2 cucharadas de aceite de girasol
Para el relleno
- 150 gr de queso crema descremado
- 1/2 pote de yogurt firme, descremado y de sabor a vainilla
- 3 sobres de edulcorante sucralosa
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 7 gr de gelatina sin sabor
Para la cobertura
- Media taza con pulpa de maracuyá
- 1 sobre de edulcorante
Preparación
- El primer paso consiste en preparar el relleno de nuestro postre, para ello debe mezclar en un bowl el queso crema, el yogur, el edulcorante y la esencia de vainilla. Luego incorporar la gelatina previamente hidratada en 1/4 de agua.
- Por otro lado debe preparar la base, para ello es necesario triturar la avena arrollada y la harina de algarroba, agregar aceite y luego mezclar. Ahora colocar papel aluminio a un plato y ponerle un cortante redondo por arriba, luego verter la mezcla y aplanar bien con ayuda de una cuchara.
- Cuando la base esté lista, agregar la mezcla para el relleno preparada en el primer paso y llevar al refrigerador por alrededor de 3 horas, hasta que se encuentre sólido.
- El paso siguiente consiste en agregar a una olla la pulpa de maracuyá y el edulcorante hasta que se disuelva. Por último, desmoldar el cheesecake y agregar la mezcla con la fruta.
