El salmón, para la mayoría que son amantes a la comida de mar es el plato número uno, puesto que es rico, saludable no tiene espinas, es rápido y fácil de preparar, de ahí que es un filete muy recomendado por los especialistas de la salud. El consumo de este pescado fino favorito para muchos, ha aumentado en las últimas décadas pues está repleto de nutrientes, proteínas de alta calidad, vitaminas y minerales, alto contenido de Omega-3, etc.
Si te llama mucho la atención la gastronomía de diferentes culturas, la cocina gourmet, en especial la saludable y disfrutas aprender e indagar, te invito que leas este artículo porque aquí te muestro la técnica completa, tips y el paso a paso para que te quede un riquísimo y jugoso salmón a la mantequilla con limón para que lo compartas en estas vacaciones ya sea en cenas familiares o almuerzos con tus amigos. ¡No te quedes con las ganas de preparar esta exquisita receta!
Ingredientes:
- Salmón.
- 1/8 de taza de sumo de limón recién exprimido.
- 1/8 de taza de agua.
- 2 dientes de ajo picados.
- Sal y pimienta al gusto.
- 3 cucharadas de mantequilla fría sin sal.
- 1 cucharada de perejil fresco o cilantro picado.
- Aceite de oliva.
Preparación de la salsa de mantequilla:
- En una sartén de teflón con la llama media, échale un poco de aceite, ajo picado y cocínalo por 1 minuto y medio.
- Añádele el 1/8 de jugo de limón.
- Luego la sal y la pimienta al gusto.
- Un par de minutos después que el jugo empiece a hacer burbujas lo debes retirar de la estufa.
- A este jugo ve sumándole los 3 cuadritos de mantequilla uno detrás de otro para que se derritan fuera del fuego. En este paso la mantequilla fría se utiliza así para que no se corte y para que quede un salsa con esa consistencia.
- Incorpora el perejil picado o el cilantro para finalizar la salsa de mantequilla.
Preparación del salmón:
- Es ideal que el salmón esté a temperatura ambiente y no congelado porque es más complejo de cocinar, y que las especies para el sabor que le agreguemos antes de todo no se incorporaren fácilmente.
- Es importante que seques el salmón con toallitas de cocina.
- Luego sazónalo con sal y pimienta por los dos lados.
- Rápidamente llévalo en un sartén antiadherente a para que el pescado no sude con la sal.
- Rocíale aceite en spray o aceite normal al sartén y déjalo calentar bien para que no se peque el salmón con la llama baja para que se cocine gradualmente, poco a poco de abajo hacia arriba.
- Coloca el salmón con el cuero o la piel para abajo para que salga crujiente, esto protege el pescado de quemarse, que no se cocine bien o que se seque.
- Al principio puedes oprimir el pescado con una espátula para que el pescado se cocine parejo y no se encoja.
- Después de 7 minutos cuando el salmón ya coció más de la mitad, lo volteas y lo dejas por 2 o 3 minutos si lo prefieres termino medio, si no déjalo 5 minutos más.
- Esta receta la puedes acompañar de varios vegetales, en este caso serán espárragos, trocitos de zanahoria cocidos al vapor, arroz blanco y rodajas de limón.
- Para finalizar emplátalo y baña tanto el salmón como los vegetales con la salsa de mantequilla recién hecha.
Puedes preparar el filete de salmón como quieras, existen muchas opciones dependiendo cual te guste más y se acomode a tu dieta si la tienes: ahumado, crudo, a la plancha, al ajillo, con salsa mostaza, a la naranja, a la plancha con cebolla caramelizada, etc., no hay excusa para no hacerlos debido a que hay miles de recetas rondando en internet o redes sociales que te enseñan el paso a paso como lo hice aquí.
Una recomendación clave es que si eres una persona que está empezando a entrenar y quieres perder grasa y ganar más masa muscular, este alimento es ideal para eso, pues además de proporcionarte más energía para hacer ejercicio, te aporta proteínas, aminoácidos y nutrientes esenciales que necesitas porque contiene 22 gramos de proteínas por cada 100 gramos, por eso, los gimnastas lo aconsejan más que las carnes. Otras propiedades del salmón son para la vista, pérdida de peso, trae mucho beneficio al cerebro ayudándolo a frenar del deterioro con el tiempo, para personas que sufren del corazón y la tensión.