Tanto el jengibre como la cúrcuma son dos ingredientes bastante utilizados en la cocina para proporcionar sabor y olor. Pero su consumo también se ha destinado desdes hace años, a la hora de tratar diferentes problemas en la salud de forma natural. Por ejemplo al jengibre o Zingiber officinale presenta compuestos fenólicos entre los que se incluye el gingerol, conocido por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
De igual manera la cúrcuma o Curcuma longa presenta un compuesto llamado curcumina que ayuda a tratar diferentes problemas crónicos. Debido a que se le atribuye la capacidad para reducir la inflamación y combatir los radicales libres. Estos dos alimentos se pueden consumir crudos, secos o molidos en diferentes preparaciones, como la que veremos más adelante para disminuir el dolor en nuestras articulaciones.
Beneficios del jengibre y la cúrcuma
A esta combinación se le ha atribuido la capacidad para disminuir diferentes problemas en la salud, sin embargo hace falta más evidencia para confirmar estos posibles efectos al incluirse en una sola preparación. Entre los beneficios que los han hecho bastante populares al consumirse de forma individual, podemos encontrar:
Reducir la inflamación: Tanto el jengibre como la cúrcuma tienen propiedades antiinflamatorias, lo que ayuda a proteger contra diferentes enfermedades. Recordemos que la inflamación crónica favorece el desarrollo de problemas cardiacos, cáncer e incluso diabetes.
Aliviar el dolor: La curcumina permite reducir el dolor asociado con la artritis al igual que el jengibre, pero a este último también se le atribuye la capacidad para disminuir el dolor menstrual y el muscular, causado por la práctica de ejercicio.
Reducir las náuseas: existen algunos estudios en lo que se afirma que el consumo de 1 g de jengibre por día logra reducir las náuseas y vómitos postoperatorios, sin embargo debes consultarlo primero con el médico. También disminuye las náuseas a causa del continuo movimiento y de trastornos gastrointestinales.
Mejorar la función inmunológica: Son un método para la prevención de diferentes problemas de salud relacionados con virus o bacterias presentes en el ambiente, y alergias estacionales que afectan el tracto respiratorio.
Infusión de jengibre y cúrcuma para el dolor articular
Aunque consumir jengibre y cúrcuma en porciones moderadas es saludable, es importante que tengas en cuenta que el consumo excesivo está contraindicado cuando tomas anticoagulantes, durante el embarazo, en aquellas personas con problemas de hipertensión, problemas del corazón, diabetes, hemofilia y bajo peso.
Tendiendo en cuenta la información suministrada, ahora te enseñamos cómo preparar una infusión a base de cúrcuma y jengibre para que puedas disminuir el dolor articular, es realmente fácil y con pocos ingredientes.
Ingredientes
- 1 ramita de canela
- 1 cucharada de miel
- Un litro de agua
- 5 g de jengibre
- 5 g de cúrcuma
Preparación
- El primer paso es hervir el agua, luego debes añadir la canela, el jengibre y la cúrcuma, dejando por 30 segundos. Pasado el tiempo retira del fuego y deja infusionar por alrededor de 10 minutos.
- Finalmente pasa la bebida por un colador y endulza con miel. Puedes tomar la primera taza en ayunas y dependiendo de cómo te sientas, consumir 20 minutos después de las comidas.