La parálisis facial o parálisis de Bell es una condición en la que los músculos del rostro, los cuales son los encargados de la movilidad se paralizan. Esto quiere decir que el rostro se ve caído, la sonrisa se desdibuja, el ojo se cierra involuntariamente y puede ocurrir en cualquier edad.
Su nombre proviene gracias al cirujano escocés Sir Charles Bell, quien fue el primero en describir el trastorno. Por lo general este tipo de parálisis solamente afecta un nervio del par facial y un lado de la cara.
En algunos casos el estado de la cara se recupera por sí solo, y en otro requiere tratamiento y bastantes terapias físicas. Por ello es indispensable acudir al médico, ya que cuando el ojo no puede parpadear, la córnea tiende a secarse y las partículas pueden entrar a dañar el ojo.
Si sufres de parálisis cerebral es necesario usar lágrimas artificiales y aplicar un lubricante para poder mantener el ojo protegido.
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Síntomas de la parálisis facial
Cuando se presenta en nuestra vida la parálisis de Bell, lo primero que ocurre es que se desvanece la función del nervio facial. Esto quiere decir que los mensajes que el cerebro envía a los músculos faciales no puedan llegar. Dichos mensajes abarcan el transportar impulsos nerviosos a las glándulas lacrimales, salivales, los músculos del rostro y las sensaciones del gusto.
Esta falta de comunicación con el cerebro, permite que aparezca la debilidad en la zona facial y por ende se presentan los siguientes síntomas:
- Dificultad de subir las cejas, sonreír, abrir y cerrar, por completo el ojo
- Dolor agudo en el rostro
- Dificultad en la lagrimación y el habla
- Dificultad en la respiración nasal
- Se acumulan los alimentos en la parte posterior de la boca
- caída recurrente de saliva
Causas de la parálisis
Hoy en día no están del todo claro las causas que conllevan a que el rostro quedé inmóvil, pero por lo general se presenta a causa de:
- Cirugía por tumores del tronco encefálico, tumores de nervios adyacentes al nervio facial, lo que puede producir una lesión del nervio.
- Cuando existe una inflamación del nervio facial, esto dentro su canal óseo. Lo cual conlleva a la oclusión de los vasos sanguíneos que irrigan al nervio.
Según la Clínica Mayo se produce por infecciones virales como:
- Aftas y herpes genital (herpes simple),
- Mononucleosis infecciosa (Epstein-Barr)
- Infecciones por citomegalovirus
- Enfermedades respiratorias (adenovirus)
- Rubéola y Paperas
- Gripe (influenza B)
- Enfermedad de manos, pies y boca (coxsackievirus)
- Congénita (Síndrome de Moebius).
- También la varicela zoster que puede afectar al nervio facial.
Pronóstico de la parálisis
El tiempo de recuperación depende en gran medida de la causa de su aparición, por ello es importante acudir al médico, sin embargo este proceso tarda alrededor de 6 meses máximo.
La parálisis de Bell influye en cada individuo en maneras diferentes. Los casos leves no requieren tratamiento alguno, pues los síntomas desaparecen solos en unas 2 semanas. Pero existen otros casos en el que el tratamiento o cura puede necesitar medicina y sesiones terapéuticas.
Si se ha sufrido un derrame cerebral, lo más importante es acudir con rapidez al médico ya que los daños serán menores y la posibilidad de recuperación con tratamiento será más efectiva.
¿Cómo se trata ?
Según National Institute of Neurological Disorders la parálisis se puede manejar con esteroides y con un medicamento antiviral como aciclovir,el cual es usado para combatir las infecciones. También combinado con un antiinflamatorio como el esteroide prednisona que es usado para reducir la inflamación e hinchazón.
En cuanto a los medicamentos como la aspirina, acetaminofeno, ibuprofeno ayuda a controlar el dolor. Pero se debe consultar con un especialista antes de tomar algún producto de venta libre
