La diarrea es un problema de salud muy frecuente, que se caracteriza por deposiciones sueltas, líquidas y frecuentes. Por lo general es de corta duración y puede mejorar con algunos cuidados caseros, pero si dura semanas, es el indicio de otro problema de salud que requiere atención médica. Entre las posibles causas se encuentran virus, bacterias, parásitos, medicamentos, intolerancia a la lactosa, otro tipo de comida o bebida.
Los síntomas más comunes que están asociados con la diarrea son dolor abdominal, hinchazón, náuseas, necesidad urgente de ir al baño. En algunos casos puede presentarse fiebre, sangre y moco en las heces. En el día de hoy te presentamos algunos cuidados que puedes tener en casa para mejorar la situación. Si persiste, debes consultar con el especialista.
1-Cuida de la alimentación
Elegir qué comer y qué evitar es importante para no agravar el problema y que tu cuerpo pueda irse recuperando poco a poco. Cuando se tiene diarrea es bastante problable que no puedas tolerar bien los alimentos fritos y grasosos. Así como aquellos ricos en fibra, que son el salvado, algunas frutas y vegetales, ya que aumentan la hinchazón. Trata de no consumir el brócoli, repollo, coliflor, vegetales de hoja verde, garbanzos, frijoles, maíz, chícharos, pimientos, ciruelas pasas, leche, helado, alcohol y edulcorantes artificiales.
2-Aumentar la hidratación
Es muy importante tomar la cantidad necesaria de líquidos, ya que es más probable que ocurra una deshidratación, en especial en los niños. Si tienes diarrea leve puedes elegir algunas soluciones de hidratación, incluso ciertas bebidas deportivas que se encuentran en el mercado. Los refrescos, las bebidas carbonatadas o con cafeína, la leche y el alcohol no deben usarse con este propósito. Pueden empeorar el problema con pequeñas cantidades.
3-Incluir probióticos
Incluir alimentos con una buena fuente de bacterias buenas es una gran opción, ya que trabajan en tu cuerpo para crear un ambiente intestinal saludable. Los probióticos ayudan en la diarrea al restaurar el equilibrio de bacterias, se trata de microorganismos vivos que existen en varios productos, como lo son el kéfir, kimchi, kombucha, chucrut, miso, tempeh, yogur, quesos blandos añejos, queso cottage y pan de masa fermentada. También los puedes encontrar en polvo o píldoras.
4-Prueba el agua de arroz
Es un remedio casero tradicional rápido y eficaz para tratar los episodios de diarrea. Solo debes hervir una taza de arroz por dos de agua durante 10 minutos o hasta que al agua cambie de color. Después pasa todo por un colador, reservando el líquido para que lo puedas consumir. Se dice que tiene un efecto aglutinante en el tracto digestivo, permitiendo que las heces esten más firmes. Además, favorece la hidratación y reduce el tiempo en el que te sientes mal.
5-Prueba la dieta BRAT
Es una opción que podría funcionar para evitar que los síntomas empeoren por no comer. Aquí se incluyen productos bajos en fibra que le ayudarían a tu cuerpo a reafirmar las heces. Por sus siglas en inglés se compone de alimentos como los plátanos, arroz, puré de manzana y tostadas, su naturaleza blanda hacen que no irriten el estómago. También puedes consumir caldos claros, papas y galletas saladas.
6-Incluye otros remedios caseros
Existen otras opciones naturales que podrían ser de gran ayuda. Por ejemplo, la zanahoria es rica y nutritiva, aporta agua así como dosis de potasio, calcio, fósforo y magnesio para que mejoren los síntomas y favorece el equilibrio de la flora intestinal. La puedes consumir en purés o sopas. También podrías probar una infusión de manzanilla, ya que es considerada como antiespasmódica, por lo que podría reducir la inflamación intestinal.
7-Considere la medicación
Existen algunas opciones de venta libre que mejoran tus síntomas si no son graves, de lo contrario debes hacerlo bajo el consentimiento médico. Recuerda que este tipo de tratamientos no debe aplicarse a los niños, para ello es necesario consultar con el especialista. Algunos consejos para prevenir la diarrea son el lavarse las manos con frecuencia, especialmente antes y después de ir al baño, así como en la manipulación de alimentos. Desinfectar bien las superficies, no compartir tus artículos personales y beber agua de botella cuando te encuentres de viaje en otro lugares.
