Llegados los 40 años se debe seguir manteniendo un estilo de vida saludable, para que las condiciones a nivel del corazón, las articulaciones y la flexibilidad sean óptimas. Sin embargo se debe tener cuidado a la hora de realizar actividad física, pues existen algunos movimientos que ya no se pueden realizar como en años atrás, debido a que se aumenta el riesgo de generarse una lesión, que son difíciles de sanar y bastante dolorosas.
En esta nueva etapa de la vida, es importante tratar de no forzar demasiado las rodillas y la espalda, por lo que los ejercicios deben ser más suaves, acompañado de alimentación equilibrada y el oportuno descanso.
1-Jalones de pecho
A parte de ser un ejercicio incómodo, el peso que se le agrega puede aumentar las probabilidades de lastimar la articulación de los hombros, además de ejercer tensión en el cuello y las arterias.
Una forma menos agresiva de llevar a cabo el ejercicio consiste en utilizar un mínimo de peso y realizarlo de forma lenta. Inclusive se puede ejercitar el cuerpo sin la necesidad de un equipo, logrando ser de gran ayuda para relajar la parte superior de las espalda, después de un largo día de trabajo en el escritorio.
2-Inmersión de tríceps
Los tríceps son ese músculo que se encuentra en la parte superior de los brazos, por lo que a la hora de trabajar dicha zona, este ejercicio resulta efectivo. Pero a medida que pasan los años puede volverse algo difícil de realizar, por lo que una forma incorrecta puede causar desgarros en el maguito rotador.
Este tipo de lesiones se caracterizan por ser muy dolorosas y tardar bastante tiempo en sanar. Es por ello que se recomienda realizar movimientos en donde no tenga que trabajar con el peso de su cuerpo, pues existen alternativas con cuerdas que le permiten tener el mismo entrenamiento pero con un riesgo reducido.
3-Peso muerto
El peso muerto genera buenos resultados en las personas jóvenes que lo incluyen en su rutina, pero al adoptar una mala postura es bastante peligroso, ya que conduce a problemas en la columna, así como en las rodillas.
Entonces si es una persona mayor y no está muy familiarizado con el ejercicio, la mejor opción es usar pesas pequeñas, para que el entrenamiento sea similar y no agregue más dolor o molestias de las que se producen con la edad.
4-Presa de piernas
A la hora de asistir al gimnasio debe tratar de evitar este tipo de máquinas, pues es un ejercicio difícil de realizar, inclusive para las personas jóvenes y puede llegar a ser más intenso con la edad, afectando tanto a las rodillas como a la espalda.
Pues se vuelve difícil de presionar hacia adelante con el peso y al mismo tiempo mantener la espalda en la forma correcta. Existen diferentes ejercicios con mancuernas que le proporcionan un entrenamiento similar, sin tener que comprometer las articulaciones y la columna vertebral.
5-Extensión de piernas
Al igual que el ejercicio anterior, su uso tiene efectos negativos en nuestro cuerpo con el paso de los años. Ya que las rodillas están realmente comprometidas al extenderse completamente con peso encima, siendo inclusive riesgoso para las personas jóvenes, pues el ángulo es anormal y aumenta el desgaste de las articulaciones. Esto desarrolla dolor crónico que se aumenta con la edad, al verse afectado el funcionamiento de las rodillas.
6-Sentadillas
Las sentadillas son geniales para trabajar los glúteos y las piernas, pero a partir de los cuarenta años también se empieza a ver afectada la espalda y las rodillas al realizar flexiones de forma excesiva, en particular cuando se agrega peso. Además se dice que este tipo de ejercicios logran desarrollar los músculos de las caderas, lo que puede hacer que se vea más pesado.
7-Crujidos
Tanto los crujidos como los abdominales puede generar dolor, así como aumentar el riesgo de lesión en la columna vertebral y en el cuello. Además no son muy efectivos para trabajar vientres voluminosos.
Por lo que si desea trabajar la zona abdominal, en lugar de los crujidos puede incluir el ejercicio de tabla, teniendo en cuenta realizarlo correctamente. Ya que ejercita el núcleo sin comprometer tanto los huesos y músculos de la espalda.
8-Cardio intenso
Realizar cardio resulta beneficiosos para la salud del corazón y la quema efectiva de grasa, sin embargo el exceso puede maltratar los músculos que no sanarán tan rápido, ya que se encuentra largas horas en la cima de su nivel.
En lugar de ello puede tratar de realizar entrenamiento por intervalos, denominado HIIT, que consiste en trabajar por corto tiempo, pero de forma intensa y con un periodo de descansando entre series.
