La zanahoria es una hortaliza rica en vitamina A,B,C,E, minerales, antioxidantes que optimizan la función del hígado y los riñones. La zanahoria, además, nos ayuda a combatir el estreñimiento, depurando el intestino de toxinas y favoreciendo así la correcta absorción de los nutrientes. Al haber menos elementos nocivos en el torrente sanguíneo, favorecemos el trabajo del hígado y los riñones.
Por su parte los pepinos contienen vitamina C, beta-carotenos, flavonoides, y quercetina, un antioxidante que nos protege frente a múltiples enfermedades crónicas. los pepinos son muy bajos en calorías. Por ello, es común que formen parte de toda dieta para bajar de peso dado su alto índice de fibra soluble.
Ingredientes
- 1 pepino
- 2 zanahorias
- 1 cucharadita de perejil (5 g)
- 1 vaso de agua (200 ml)
- El jugo de medio limón
Preparación:
- Lavamos bien el pepino y las zanahorias. Después, procederemos a quitar la cascara y a cortarlos en trocitos para facilitar el licuado.
- Luego exprimimos medio limón un aporte rico en antioxidantes y vitamina C que favorecerá aún más la salud de nuestro hígado y los riñones.
- Pica un poco de perejil. Si bien es cierto que su sabor es un poco intenso, se trata de una planta medicinal muy adecuada para cuidar de nuestros riñones.
- Llevar todos los ingredientes a la licuadora junto con ese vaso de agua. Licúa bien, sobre todo para conseguir que las zanahorias queden sin ningún trazo suelto que impida que nos lo podamos beber con tranquilidad.
Recomendaciones:
- Consumir esta bebida a base de zanahoria y pepino en las mañanas, acompañando con unas tostadas integrales y un huevo duro, de esta manera tendrás un delicioso y saludable desayuno que te permitirá combatir el hígado graso.
- Es aconsejable tomar este licuado unos 8 días seguidos cada mes. Tu hígado y los riñones lo van a notar.